Qué es la web 3.0 y por qué tiene tanto potencial

Qué es la web 3.0 y por qué tiene tanto potencial

Qué es la web 3.0 y por qué tiene tanto potencial

Últimas actualizaciones:

9 ene 2022

“Web 3.0” es una de esas palabras de moda que ha estado circulando por las profundidades de internet durante los últimos años y que a menudo se utiliza como sinónimo de la tecnología de cadena de bloques. Cuando empezamos a ver el término web 3.0 en varias publicaciones y artículos no entendíamos del todo a qué se referían. También pensamos: “¿Web 3.0? Nunca hemos oído hablar de la web 1.0 ni de la 2.0, ¿qué pasó con ellas y cómo es que ya estamos en la web 3.0?”.

Dudando de si nos habíamos perdido algo importante y sin tener ni idea de qué era la web 1.0 o la web 2.0, sentíamos que habíamos encontrado accidentalmente una copia de la tercera película de El Señor de los Anillos sin haber vivido la magia de las dos primeras películas. El FOMO era muy fuerte, así que nos embarcamos en la tarea de indagar más sobre este tema. Por tanto, si te encuentras en una situación similar, preguntándote de qué se trata todo esto de la “web 3.0”, y si todo tiene tanto sentido para ti como intentar ver las escenas de los elfos en El Señor de los Anillos sin subtítulos, entonces has llegado al lugar correcto, ya que vamos a analizar este tema para ponernos al día.

Historia de la web

Cuando la gente habla de la web 1.0, 2.0 y 3.0, es importante aclarar que muchas personas tienen muchas explicaciones y definiciones diferentes de estos términos. Es como acercarse a 100 personas diferentes en una conferencia de criptomonedas y preguntarles qué significan las criptomonedas para ellos, seguramente cada persona dé una respuesta diferente en función de su punto de vista. No hay una descripción en la que todos estén de acuerdo, todavía no existe “un patrón universal” para estos términos.

¿Qué es la web 1.0?

Para entender qué es la web 1.0, tenemos que retroceder en el tiempo hasta los inicios de internet. Lo creas o no, internet se creó con un propósito completamente distinto al de ver vídeos de gatos, hacer compras o ver memes. Los orígenes de internet se remontan a investigaciones realizadas en la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa (DARPA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos durante 1969, donde algunas de las mentes más brillantes de todo el mundo se reunieron para trabajar en lo que inicialmente se concibió como un proyecto de comunicaciones militares. Internet inicialmente estaba compuesta por páginas web unidas por hipervínculos, con texto pero sin ningún tipo de imágenes, además estas páginas eran de “sólo lectura” y no había posibilidad de interactuar con ningún elemento de forma significativa. Básicamente, la primera internet era un gigantesco depósito de libros electrónicos.

La web 1.0 se convirtió en un recurso increíble para compartir información y las principales ramas del gobierno americano, laboratorios de investigación, centros educativos e instituciones que accedían a las páginas web compartían información cuando podían conectarse a través de servidores comerciales. La gente se conectaba principalmente para leer, ya que no había funcionalidad de lectura/escritura y gran parte del contenido que estaba en internet se generaba primero fuera de línea antes de ser compartido. No sería hasta unos años más tarde cuando se implementaría una funcionalidad básica de chat a través de un sistema de tablones de anuncios (BBS, por sus siglas en inglés) que permitiría la interacción entre usuarios.

Eventualmente, las URL dinámicas y otras innovaciones harían evolucionar las capacidades de internet, pasando de la web 1.0 a la 2.0. La transición entre estas fue un proceso gradual que tuvo lugar a lo largo del tiempo, ya que se añadieron nuevas características y funciones sobre las infraestructuras ya existentes, por lo que no hay una definición clara o un marco temporal para determinar cuando la web 1.0 se convirtió oficialmente en la web 2.0. Un dato que nos ha parecido interesante, y que deberías mencionar en tu próxima reunión si quieres impresionar a alguien, es que la publicidad estaba prohibida en la web 1.0 y tuvieron que pasar unos cuantos años hasta que se permitiera la existencia de algún tipo de publicidad en internet. Algo difícil de imaginar hoy en día.

Cómo eran los sitios Web durante la web 1.0. Imagen vía The Finanser

¿Qué es la web 2.0?

La web 2.0 es donde todo se pone emocionante y es básicamente la internet tal y como lo conocemos en la actualidad, con todos nuestros sitios de compras favoritos, plataformas de streaming de vídeo, criptomonedas, videojuegos, redes sociales, ¡lo que sea! Un ejemplo sencillo que podría ayudarte a visualizar la transición de la web 1.0 a la 2.0 es el funcionamiento de una tienda de comercio electrónico. Una tienda de comercio electrónico construida en la web 1.0 habría sido como una revista con algunas imágenes básicas y algo de texto en el que un usuario podría desplazarse y leer, y eso sería todo. La web 2.0 es la que ha permitido agregar todas las integraciones y funciones adicionales, como la posibilidad de añadir artículos al carrito de la compra, pasar por caja, pagar con una tarjeta de crédito y dejar una reseña para que otros la lean. La web 2.0 también trajo consigo la revolución de los contenidos generados por los usuarios, en la que usuarios como nosotros podemos crear contenidos y publicarlos en internet, como este artículo, o esos bochornosos y desagradables mensajes de Facebook de cuando estábamos en el instituto. ¿Quién se acuerda de MySpace?

El concepto de web 2.0 fue acuñado en 2004 por el pionero de la web Dale Dougherty, vicepresidente de O’Reilly (la empresa de medios de comunicación, no la tienda de repuestos de automóviles). La web 2.0 se conoce a menudo como “web social”, “web de la sabiduría”, “web centrada en las personas”, “web participativa” y “web de lectura/escritura”, ya que permitió por primera vez a la humanidad compartir información, socializar y transmitir fácilmente sabiduría (o vídeos de gatos) a cualquier parte del mundo de forma casi instantánea. Esta era marcó el comienzo de los contenidos generados por los usuarios a una escala que nunca antes había sido posible gracias a blogs, vídeos compartidos, chats, mensajes de voz, correos electrónicos y publicaciones en las redes sociales. La “web social” alcanzó una adopción a escala masiva más rápidamente que cualquier otro avance tecnológico de la historia y ha mantenido esa posición hasta que apareció el Bitcoin unos años más tarde.

Uno de los factores clave que impulsaron el desarrollo de la web 2.0 fue el desarrollo de tecnologías de nueva generación relacionadas con la Web. Ajax, JavaScript, las hojas de estilo en cascada (CSS), el Modelo de Objetos para la representación de Documentos (DOM), el HTML extensible (XHTML), las transformaciones XSL (XSLT)/XML y Adobe Flash, son desarrollos que proporcionaron a los usuarios una forma inmersiva y entretenida de interactuar con las  páginas web. Al igual que sucedió con la transición gradual entre la web 1.0 y la web 2.0, ya estamos en plena transición hacia la web 3.0.

Ejemplo de uno de los factores diferenciadores entre la web 1.0 y la 2.0. Imagen vía Myeltcafe

¿Qué es la web 3.0?

El concepto de web 3.0 no es nuevo, ya que los primeros pioneros que estuvieron presentes en este ámbito desde la transición de la web 1.0 a la web 2.0 tuvieron la previsión de saber que la evolución a la web 3.0 ocurriría eventualmente, al igual que en la actualidad ya se habla de la web 4.0 y 5.0, aunque apenas estemos entrado en la web 3.0. El primer concepto de web 3.0 proviene de Tim Bernes-Lee, un informático británico al que se le atribuye la invención de la World Wide Web, quien acuñó el concepto de web 3.0 en 1999. Así como la web 2.0 se denomina a menudo “web social”, la web 3.0 se denomina a menudo como la “web semántica”.

Bernes-Lee tuvo la visión de que la web semántica sería capaz de analizar todos los datos de internet, permitiendo a las máquinas realizar muchas tareas sin necesidad de intervención humana. Gran parte de las capacidades que desarrollaría Internet y que Lee había imaginado en 1999 ya se han hecho realidad, aunque una denominación más reciente de lo que comprendería la web 3.0 fue publicada en 2006 por John Markoff, del New York Times. En lugar de la “web semántica”, Markoff se referiría a la web 3.0 como “la web inteligente”, y afirma que tendría 5 características.

Las 5 características de la web inteligente:

  1. Web semántica: la web 3.0 va más allá de centrarse en palabras clave y valores numéricos para entender contenidos como fotos, vídeos o audio y asociaciones más complejas entre productos, lugares y comportamientos específicos.

  2. Inteligencia artificial: el software de inteligencia artificial es capaz de interpretar el lenguaje natural y entender la intención que se da a las palabras. También puede reconocer lo real de lo falso y proporcionar datos más confiables.

  3. Gráficos 3D: la tercera generación de internet debe integrar el uso de gráficos 3D y tecnologías de realidad virtual para proporcionar resultados sobre lugares de la vida real, productos diversos y objetos de interés.

  4. Conectividad: dentro de la web 3.0, la información está más conectada a través de metadatos semánticos, aprovechando toda la información disponible.

  5. Omnipresencia: Se eliminan los silos de datos: todos los dispositivos deben estar conectados a la red y el contenido es operable por diferentes aplicaciones.

Está claro que estas cinco características están evolucionando y dando forma al internet que conocemos. Los avances tecnológicos se están produciendo en cada una de esas áreas para crear una versión de internet más avanzada que la que utilizamos hoy.

Diferencias entre la web 1.0, 2.0 y 3.0. Imagen vía geeksforgeeks

Una de nuestras descripciones favoritas de internet dice que esta es la totalidad del conocimiento combinado de la humanidad accesible a todo el mundo. La web 3.0 promete establecer el acceso a esta información de una manera más razonable de lo que es posible con las limitaciones que existen dentro del actual esquema de empresas como Google. La web 3.0 necesita el uso de lenguajes ontológicos declarativos como el Web Ontology Language (OWL) para producir ontologías específicas del dominio que las máquinas puedan utilizar para realizar razonamiento inteligente y así puedan sacar conclusiones y no sólo cotejar palabras clave, permitiendo a las máquinas procesar el contenido de una manera más humana.

Microsoft está realizando avances en el sector de la realidad virtual, la realidad aumentada y el metaverso, llevando a la web 3.0 hacia la adopción generalizada. Imagen vía Microsoft

Pero, ¿qué tiene que ver la web 3.0 con la tecnología de cadena de bloques y las criptomonedas?

Por primera vez en la historia de la humanidad, la tecnología de cadena de bloques proporciona un mecanismo de confianza que se basa puramente en matemáticas claramente definidas e indiscutibles, en lugar de la errónea, frágil y emocionalmente sesgada naturaleza humana. Esto permite agregar confianza e integridad a los sistemas y a las funciones críticas que dirigen nuestra vida diaria. Ya confiamos en las calculadoras por encima de nuestras propias capacidades aritméticas mentales, la cadena de bloques se encuentra en una situación similar, aunque con la posibilidad de impactar muchas áreas de nuestras vida, incluyendo casos de uso que abarcan diversos sectores, como las finanzas, la atención médica, la logística de cadenas de suministros, los videojuegos, la agricultura y muchos otros sectores. La tecnología de cadena de bloques ya se está entrelazando con la web 2.0 tradicional y ya se está construyendo un marco de trabajo de la web 3.0 totalmente independiente en redes como Ethereum.

Evolución de la web. Imagen vía medium.com/fabric-ventures

El auge de tecnologías como los registros distribuidos y la cadena de bloques permiten la descentralización de los datos y la creación de un entorno para las transmisiones y transacciones de datos de manera segura, transparente, verificable y a prueba de manipulaciones. La integración de la cadena de bloques en la web 3.0 permitirá superar problemas actuales de la web 2.0 como la centralización, la vigilancia y la publicidad explotadora/manipuladora, a la vez que proporcionará el marco para soportar una infraestructura descentralizada que tendrá la capacidad de desplazar a los gigantes tecnológicos centralizados, lo que hará que los individuos sean legítimamente dueños de sus propios datos.

Algunas de las ventajas de la cadena de bloques y la tecnología de registros distribuidos. Imagen vía medium.com/kalyanicynixit

Si la web 3.0 adopta y utiliza la tecnología y la infraestructura de cadena de bloques de forma descentralizada a escala masiva, permitirá a las personas ser verdaderamente autónomas, ser dueñas y controlar quién se beneficia del tiempo que invierten en línea. Una web descentralizada permitirá a los usuarios dictar cómo desean ser compensados por su tiempo y sus datos, eliminando las prácticas poco éticas de los gigantes tecnológicos que se benefician obteniendo miles de millones de dólares cada año de la explotación de los datos de los usuarios.

Estamos viendo los primeros avances en este ámbito y ya son millones los usuarios (entre los que nos incluimos) que han migrado sus navegadores de Google Chrome al navegador Brave, que incorpora elementos de la web 3.0 y que cuenta con capacidades de la tecnología de cadena de bloques que le permite compensar a los usuarios de forma justa por su tiempo, viendo anuncios, u optando por desactivar las cookies de seguimiento y los anuncios por completo, liberándolos de las prácticas de vigilancia y manipulación de los gigantes tecnológicos.

El navegador Brave elimina el comportamiento acosador de la navegación web. Imagen vía bitpartikel

Es importante aclarar que la web 3.0 no implica automáticamente que haya descentralización, por lo que va a ser muy difícil que este sueño utópico que tienen millones de personas se haga realidad.

La web 3.0 y la descentralización

Como hemos mencionado anteriormente, la web 3.0 y la tecnología de cadena de bloques se utilizan a menudo como sinónimos, lo que puede ser engañoso y no es exactamente correcto. No existe nada en el marco tecnológico de la web 3.0 que establezca que tenga que utilizar ni construirse sobre la tecnología de cadena de bloques. Aunque creemos que es justo suponer que la tecnología de cadena de bloques seguirá desarrollándose, integrándose y desempeñando un papel importante en la web 3.0, como ya hemos visto que ocurre en muchos sectores.

Las redes de la web 3.0, como Ethereum, tienen la capacidad de descentralizar prácticamente todos los sectores. Imagen vía prsarahevans.com

Esto nos lleva a otra interpretación errónea que tienen muchas personas y es que muchas asumen que la tecnología de cadena de bloques significa automáticamente descentralización. Es decir, mucha gente tiene la suposición incorrecta de que la suma de la web 3.0 con la tecnología de cadena de bloques es igual a descentralización, lo cual no es correcto. Al contrario, ¡podría ser lo opuesto!

Aunque muchos apreciamos que la tecnología de cadena de bloques tenga la capacidad de crear un marco descentralizado y que funcione realmente entre pares, la tecnología de cadena de bloques también puede conducir a la pérdida de libertades y de la descentralización, haciendo que se implemente un control autoritario y una centralización con esteroides. Esta es la razón por la que una de las mayores preocupaciones en el sector es que se creen criptomonedas digitales respaldadas y controladas por gobiernos (CBDCs). Asegúrate de ver este video de Coin Bureau del por qué esta es una preocupación tan grave compartida por muchas personas. Esto nos lleva al siguiente segmento, y es, “el problema”.

Industrias que están liderando la adopción de la cadena de bloques. Imagen vía The Blockchain Academy

¿Por qué impulsar una web 3.0 descentralizada?

Aunque la cadena de bloques tiene la capacidad de liberarnos de los regímenes autoritarios y de los gigantes tecnológicos que vigilan y manipulan todos los aspectos de nuestra presencia en línea, también tiene la capacidad de ponernos bajo el control de los gobiernos. Si un gobierno decidiera eliminar el dinero en efectivo y utilizar únicamente una moneda digital de banco central o adoptar una infraestructura en internet centralizada, podría tener control total de cada céntimo que entra en tu cuenta bancaria, vigilar cada céntimo que gastas, rastrear cada una de las compras que haces o los sitios web que visitas. En un escenario extremo, pero posible, los gobiernos podrían incluso tener un control total sobre la información a la que una nación puede acceder en internet o controlar todo el suministro monetario. Suena como un mundo en el que ciertamente no nos gustaría vivir. ¿A alguien más le suena a 1984 de George Orwell?

“El Gran Hermano te vigila”. El aterrador clásico de George Orwell sobre la manipulación y el control del gobierno en la famosa novela 1984. Imagen vía massacinzentadotblog

Muchas personas podrán estar leyendo esto y pensar, “bueno, yo no hago nada ilegal ni tengo nada que ocultar”, pero no se trata sólo de cumplir la ley. Esto podría dar al gobierno el poder de restringir libertades básicas a las que estamos acostumbrados. ¿Quieres asistir a una protesta o hablar de algo en lo que crees? En ese caso, un gobierno podría intervenir y bloquear los fondos de tu cuenta durante un mes por algo tan insignificante como que no te guste una publicación política en las redes sociales. ¿Y si decidieran que todos los adultos sólo pueden tomar dos cervezas a la semana? (¡Trágico!) Podrían bloquear automáticamente los pagos de cualquier compra relacionada con el alcohol. Si centralizaran y controlarán el acceso a internet, seguramente bloquearían un artículo como éste y te impedirían leerlo, reprimiendo la libertad de expresión de forma similar a como sucede en Corea del Norte y China. ¿Hemos pintado ya un panorama lo suficientemente sombrío? Creemos que ya lo has entendido.

Por si esto no fuera suficiente para impulsar una web 3.0 descentralizada, como ya hemos mencionado brevemente, muchas de los procesos de los gigantes tecnológicos son francamente espeluznantes y poco éticos, están dañando a la sociedad al fomentar las divisiones sociales entre puntos de vista opuestos, y manipulando los resultados de eventos importantes como elecciones o el Brexit. Las grandes empresas tecnológicas han sobrepasado los límites y nos están afectando a todos. Se han publicado muchos artículos sobre cómo los gigantes de las redes sociales están explotando y socavando la democracia. Recientemente han salido a la luz algunos documentos reveladores y profundamente perturbadores que muestran cómo las personas son utilizadas como ganado, siendo manipuladas y explotadas por grandes empresas tecnológicas como Facebook, Google y Amazon. Se ha descubierto que Facebook (que también es dueña de Instagram) ha estado compartiendo y vendiendo secretamente nuestra información privada a terceros para la creación de perfiles psicográficos de usuarios para influir en las campañas políticas o para su venta a empresas de marketing y publicidad para que puedan aprovechar esa información para dirigirnos a la publicidad.

Los gigantes de las redes sociales filtraron información privada engañando a la opinión popular e influyendo en los resultados del Brexit y las elecciones políticas. Imagen vía Cnet

Estos actos poco éticos de Facebook han hecho que la empresa se vea envuelta en situaciones controvertidas, lo que la ha llevado a tribunales en múltiples ocasiones. Facebook ha sido acusada y juzgada por algunos de los peores delitos que existen en nuestra sociedad, como la propagación de discursos de odio que alimentaron genocidios, por crímenes de guerra en Myanmar o por abusos a los derechos humanos, lo que ha impulsado la creación de múltiples movimientos “anti Facebook” en todo el mundo. Si aún no has visto los documentales “The Social Dilemma” o “The Creepy Line“, sobre cómo las redes sociales y los gigantes de la tecnología están manipulando a la sociedad, te los recomendamos para que entiendas las intenciones de muchas de estas empresas con las que interactuamos a diario. Intenta verlos sin tirar tu ordenador por la ventana por el miedo, el asco y la rabia que producen, allí entenderás por qué la descentralización es tan importante.

Google tiene el poder de manipular los resultados políticos y económicos. Imagen vía usnews.com

A medida que descubrimos más y más acerca de los engaños que hay detrás de algunos de estos gigantes tecnológicos y cómo estamos siendo manipulados, comprendemos por qué la gente está furiosa y en búsqueda de una alternativa. Esto está dando lugar a uno de los factores que impulsan la revolución y la adopción de una web 3.0 descentralizada basada en la tecnología de cadena de bloques.

Implementaciones actuales de la web 3.0

Como hemos mencionado anteriormente, la web 3.0 no significa necesariamente que esté integrada con la tecnología de cadena de bloques, pero para el resto de este artículo vamos a trabajar bajo la suposición de que estos dos sectores se están desarrollando y están siendo explotados en conjunto, por lo  que en cada mención de la web 3.0 se debe asumir que se incluye a la cadena de bloques en el marco de internet. Las tecnologías de cadena de bloques como Bitcoin, o más aún, Ethereum, ya están proporcionando el marco inicial y básico necesario para la web 3.0 y hemos visto muchos casos de uso ya implementados y construidos sobre esta innovación tecnológica. ¿Recuerdas que internet fue la innovación tecnológica que más rápido se ha adoptado? Pues, la adopción que han tenido las criptomonedas y la tecnología de cadena de bloques está superando la adopción que tuvo internet en sus inicios, lo que significa que ya está presente de muchas maneras en nuestras vidas y probablemente continuará su crecimiento exponencial en todos los ámbitos de la vida de los usuarios de internet.

La adopción de las criptomonedas es la más rápida de la historia de la humanidad, y se está implementando en finanzas, salud, redes sociales, sitios de streaming de vídeo, alimentación y agricultura, y prácticamente en todos las industrias del mundo. Imagen vía Chaindebrief

La tecnología de cadenas de bloques ha tenido su mayor impacto en el sector de las finanzas y por una buena razón. Tras los innumerables escándalos y negocios sucios que han existido en el sector de las finanzas tradicionales desde la creación del propio sistema monetario, la tecnología de cadena de bloques y la web 3.0, gracias a redes como Ethereum, han proporcionado un marco que está reemplazando la confianza que se ha perdido en el sector financiero tradicional, ayudando a eliminar la corrupción, reduciendo los costos y aumentando la eficiencia mediante la reconstrucción de aplicaciones financieras que tienen el potencial de reemplazar todos los servicios tradicionales que existen actualmente.

La DeFi está proporcionando una evolución muy esperada al anticuado y corrupto sistema financiero tradicional. Imagen vía nimera.io

Las aplicaciones financieras descentralizadas como Aave ya están proporcionando muchos de los servicios de los bancos tradicionales, permitiendo a los usuarios prestar sus criptomonedas para ganar intereses y pedir prestado dinero contra sus posesiones de criptomonedas, un método que funciona mucho mejor que el que ofrecen los bancos. Las aplicaciones financieras descentralizadas ya están proporcionando a los usuarios la capacidad de pedir préstamos con garantías, prestar, invertir, obtener hipotecas e incluso comprar seguros casi instantáneamente, evitando la burocracia y las restricciones impuestas por los bancos, y sin necesidad de pagar comisiones y tasas de interés exorbitantes. El concepto de un sistema financiero P2P es realmente sorprendente.

Los usuarios de la DeFi disfrutan de una rentabilidad pasiva de entre el 1.5% y el 10% mensual, muy superior a la que ofrecen los bancos. Imagen vía Defipulse

La gente se ha cansado de que los bancos ganen miles de millones a costa de sus clientes, ofreciendo muy poco a cambio, a menos que estés contento con el 0.01% de interés que te pagan en tus cuentas de ahorro mientras te cobran un 20% de interés por usar sus tarjetas de crédito, por lo que millones de usuarios han recurrido a las Finanzas Descentralizadas (DeFi) para disfrutar de rendimientos muy superiores a los que se ofrecen en las finanzas tradicionales. Podríamos hablar mucho de lo superior que es la DeFi a las finanzas tradicionales, pero para evitar enredos, puedes aprender más sobre la DeFi aquí. Al momento de escribir este artículo, existen más de 100.000 millones de dólares bloqueados en los protocolos de la DeFi, y estos millones de usuarios están disfrutando de mayores rendimientos, menos trámites, menos burocracia y de mejores oportunidades para alcanzar un nivel de salud financiera con el que los bancos nunca podrán competir. La adopción de la DeFi es una tendencia que ha visto un crecimiento exponencial, y es una tendencia que se espera que continúe a medida que las generaciones más jóvenes confíen más de su riqueza a la tecnología de cadena de bloques y a aplicaciones de la DeFi y no al sistema financiero tradicional.

El número de usuarios de la DeFi aumenta a un ritmo exponencial. Imagen vía dune analytics

La web 3.0 también está borrando las líneas entre la realidad física y la realidad digital, lo que está teniendo un gran impacto en las industrias de los videojuegos, la moda y la medicina. Seguro que en las últimas semanas has oído hablar del “metaverso“, ya que Facebook y Microsoft se han involucrado a lo grande, invirtiendo miles de millones de dólares en la creación de sus propios mundos virtuales, además algunos metaversos descentralizados como Decentraland, The Sandbox y Bloktopia han estado apareciendo en todo YouTube. La web 3.0 y la cadena de bloques están afectando a la multimillonaria industria de los videojuegos y han creado un panorama económico completamente nuevo que utiliza el  modelo de “jugar para ganar“ que podría alterar nuestro sistema económico actual, como hemos cubierto repetidamente aquí, aquí y aquí. Algunas tecnologías como la realidad virtual, la realidad aumentada y el metaverso ya están en funcionamiento, y apenas estamos en los inicios de la web 3.0

La desaparición de los límites entre la realidad y el entorno virtual se está conociendo como “web espacial”, que será un desarrollo que irá más allá de la web 3.0 y que contará con capacidades mejoradas de geolocalización, tecnologías de realidad virtual, realidad aumentada y metaversos totalmente inmersivos, que serán tan realistas que no se podrá distinguir entre lo virtual y lo real. Aunque la web espacial es demasiado compleja para analizarla aquí, será esencialmente un mapa hiperrealista de todo nuestro mundo que incluirá todos los aspectos de la vida (aparte de la vida real) de manera conectada e interactiva. Deloitte publicó un fantástico artículo en profundidad sobre el concepto de la web espacial aquí.

Mapa de la web espacial. Imagen vía Deloitte

Por qué es importante todo esto

La transición a la web 3.0 es una evolución tecnológica inevitable, y nos brindará la capacidad para construir o incorporar la tecnología de cadena de bloques en nuestras vidas y así convertirse en una revolución “popular” dentro de esta evolución tecnológica. Muchos economistas y tecnólogos se han referido a la tecnología de cadena de bloques como “la cuarta revolución industrial”, y se han escrito, publicado y estudiado extensamente en los círculos académicos y empresariales documentos fantásticos como el titulado “Dando forma a la cuarta revolución industrial” de Klaus Schwab, fundador y presidente ejecutivo del Foro Económico Mundial, con un prólogo de Satya Nadella, director general de Microsoft. El Parlamento Europeo también publicó un artículo de 28 páginas titulado “Cómo la tecnología de cadena de bloques podría cambiar nuestras vidas“, que puedes leer si quieres profundizar en el tema, ya que un solo artículo no podría hacer suficiente justicia a la innovación que hay detrás de la tecnología de cadena de bloques. Si esta tecnología es lo suficientemente disruptiva como para llamar la atención del Foro Económico Mundial y de funcionarios gubernamentales de todo el mundo, merece la pena conocerla.

Muchas personas ¿apoyan esta revolución, puesto que proporciona un rayo de esperanza de tener un futuro donde contemos con una infraestructura descentralizada P2P, sin terceros de confianza, que puede soportar sistemas monetarios, sistemas de salud y cualquier sistema de infraestructuras, además de la libre transmisión de información, sin sesgos o manipulaciones, ya que estas infraestructuras y sistemas no serán controlados por ninguna autoridad central que implemente sus agendas, liberándonos efectivamente de los grilletes de los gobiernos e instituciones que prefieren beneficios y no les importa la vida humana.

También hay personas que sienten que esto es un sueño imposible, una visión utópica, posiblemente anárquica y libertaria, que probablemente nunca se hará realidad, pues esos mismos regímenes autoritarios de los que la gente quiere salvarse también están adoptando y utilizando la tecnología de la cadena de bloques y la web 3.0 para adaptarse y cambiar con estas innovaciones, sin permitir que sean reemplazados o se vuelvan redundantes, lo que también es un escenario muy probable. Cualquiera de los dos escenarios nos parecen posibles, pues puede no ser tan utópico como a muchos les gustaría, e incluso podría ser una solución a los problemas actuales que existen en la web 2.0.

Mientras algunos sueñan con una utopía de la cadena de bloques, otros temen un régimen autoritario con la cadena de bloques, pero despojémonos de los prejuicios, las esperanzas y los temores y veamos los hechos. Independientemente del futuro que creas que tendrá la cadena de bloques y la web 3.0, esta tecnología  tiene algunos beneficios importantes y un potencial casi ilimitado, sólo limitado principalmente por la innovación y la imaginación humana.

Algunos de los beneficios de la web 3.0. Imagen vía hackernoon

El rasgo clave que define a la web 3.0 es que no será un sistema utópico, no será un sistema descentralizado, o un sistema monetario P2P o cualquier otro tipo de sistema o infraestructura, tampoco será la inmersión total en un metaverso virtual. Aunque todas esas son características, rasgos y productos potenciales de la web 3.0, el rasgo clave que la define será simplemente la verificabilidad. Independientemente de lo que representa la futura web 3.0, lo que trascenderá será que todos los resultados posibles, que cada dato de cada transacción que se produzcan en la cadena de bloques será a prueba de manipulaciones, tendrá una marca de tiempo y se registrará públicamente para que cualquiera pueda verificar y autenticar la transmisión de los datos. Esta es la característica más impactante de esta tecnología. Cuando las transacciones son públicamente verificables ya no hay necesidad de confiar en que alguien está diciendo la verdad, ya que todo será 100% transparente en la cadena de bloques.

Actualmente no tenemos ni idea de lo que ocurre con nuestros datos o identidades mientras seguimos pasando más tiempo y subiendo más información a internet, ¿a dónde va esa información y cómo se utiliza? La web 3.0 añadirá una capa de transparencia y honestidad necesaria, y obligará a todos a ser más éticos y morales de lo que son en la actualidad. Si combinamos la verificabilidad con la funcionalidad de los contratos inteligentes construidos sobre esa tecnología, estaremos viviendo en una sociedad en la que todo funcionará con precisión, eliminando la desconfianza, la intervención de terceros, la manipulación, el engaño y el error humano en innumerables escenarios.

La tecnología de cadena de bloques puede proporcionar la transparencia necesaria para que vivir en el “Meta” de Mark Zuckerberg sea un poco menos espeluznante. Imagen vía New York Times.

La web 3.0 ampliará fundamentalmente el alcance de lo que es posible entre las interacciones humanas y las máquinas y ampliará las redes de pago P2P existentes, los flujos de información serán más ricos y habrá confianza en las transferencias de datos, como las que ya disfrutan los usuarios de las criptomonedas en la actualidad. Esta revolución tecnológica apoyará la aparición de nuevos modelos económicos y empresariales, como el empoderamiento de grupos cooperativos globales, las organizaciones autónomas descentralizadas y los mercados autosuficientes y autogobernados. Esto es significativo porque:

Las sociedades se volverán más eficientes al transferir el valor entre iguales, pudiendo eliminar los intermediarios, y devolviendo el valor directamente a los compradores y proveedores en un mercado. Uno de nuestros proyectos favoritos que ya se está desarrollando en este ámbito es Authentium, que utiliza la tecnología de cadena de bloques para eliminar a intermediarios, a menudo explotadores, de la industria de la cadena de suministro, permitiendo que los agricultores y los trabajadores agrícolas que trabajan duro cada día para alimentar al planeta puedan obtener mayores beneficios.

La propiedad mutua y la gobernanza de los sistemas descentralizados pueden permitir la colaboración y la incentivación a través de nuevos modelos económicos para resolver problemas complejos y sofisticados.

Las personas serán dueñas de sus propios datos, que ya no se venderán al mejor postor sin su consentimiento.

La descentralización resolverá el problema de la dependencia de plataformas o de empresas, lo que permite “asegurar el futuro” de las empresas, los negocios y las inversiones.

La mejora de las medidas de seguridad, verificación y validación a medida que los humanos, las empresas y las máquinas comparten información.

Conclusiones

Aunque es posible que la web 3.0 no cause la revolución popular que muchos esperan, no podemos negar que la tecnología de cadena de bloques seguirá desempeñando un papel importante en todas las industrias relacionadas con internet. Esto ya es bastante evidente teniendo en cuenta que los gobiernos y los gigantes de la tecnología están invirtiendo miles de millones de dólares en infraestructura de cadena de bloques. Mientras que la web 3.0 nos llevará a un futuro que mezclará la realidad con la realidad virtual e incorporará aspectos de aprendizaje automático e inteligencia artificial para hacer que nuestras interacciones con nuestros dispositivos sean más humanas, la cadena de bloques añadirá una propuesta muy interesante a lo que será posible tanto en nuestras vidas digitales como físicas.

El auge de las organizaciones autónomas descentralizadas (DAOs) construidas sobre la cadena de bloques es una propuesta interesante, ya que empresas importantes como Atari buscan ceder el control de una parte de su negocio a la comunidad y muchos otros equipos como Uniswap y Compound Finance están buscando ceder el control total de su negocio a su comunidad. Las DAOs están proporcionando quizás el modelo de negocio más justo y democrático que la humanidad ha disfrutado.

Diagrama simple que compara una DAO con una jerarquía empresarial tradicional. Imagen vía medium.com/smartz-blog

La integración de la cadena de bloques en la web 3.0 también está transformando por completo el modelo económico del planeta tal y como lo conocemos, ya que miles de millones de dólares se están destinando a plataformas financieras descentralizadas, sacando dinero del sector bancario, de las inversiones y de los métodos de inversión tradicionales, como el oro y las propiedades inmobiliarias. Muchos estrategas e inversores en este ámbito, como Raoul Pal y Michael Saylor, se refieren a esta revolución como “la mayor transferencia de riqueza en la historia de la humanidad” y un artículo de Yahoo afirma que el 47% de los millennials millonarios tienen al menos el 25% de su riqueza en criptomonedas. Estos millennials son los innovadores y visionarios del mañana, así que, si ellos creen en la cadena de bloques ahora, es probable que la incorporen a sus futuros negocios, o que las empresas integren esta tecnología para atraer a las generaciones más jóvenes, fomentando el desarrollo de la cadena de bloques junto con la web 3.0. Curiosamente, el presidente de la SEC de Estados Unidos, Gary Gensler, también ha admitido recientemente que el Bitcoin compite directamente con el sistema bancario estadounidense.

El Bitcoin ha sido el activo de mayor rendimiento de la década, desviando miles de millones de dólares de los mercados tradicionales. Imagen vía Yahoo

Aunque todavía no se sabe si la web 3.0 nos librará de las atrocidades que actualmente experimentamos en la actual forma de la web 2.0, esta web es la mejor oportunidad que tenemos, lo que nos llena de esperanzas para el futuro. Algunas redes como Bitcoin y Ethereum seguirán proporcionando a los usuarios un refugio frente a los ataques a los que todos nos enfrentamos durante nuestras actuales interacciones cotidianas en la web 2.0. Puede que la web 3.0 no “aplaste” y reemplace el sistema actual, pero tiene una gran oportunidad de solucionar muchos de los aspectos que están rotos en cuanto a centralización, vigilancia, monetización de los datos humanos y del hecho de que los seres humanos sean tratados como ciudadanos de segunda clase por nuestros bancos, las grandes empresas tecnológicas y, a menudo, nuestros gobiernos. Nos gusta mucho la frase que dice, “la tecnología de cadena de bloques puede no ser el fin de todo, pero es la mejor oportunidad que tenemos”, y el potencial que la integración de cadena de bloques tiene para impactar todos los aspectos de nuestras vidas a medida que nos aventuramos en la web 3.0 es enorme.

Aviso: Estas son las opiniones del autor y no deben ser consideradas como consejos de inversión. Los lectores deben hacer su propia investigación.

El artículo What is Web 3.0 and Why it Has Insane Potential fue publicado por primera vez en Coin Bureau.

“Web 3.0” es una de esas palabras de moda que ha estado circulando por las profundidades de internet durante los últimos años y que a menudo se utiliza como sinónimo de la tecnología de cadena de bloques. Cuando empezamos a ver el término web 3.0 en varias publicaciones y artículos no entendíamos del todo a qué se referían. También pensamos: “¿Web 3.0? Nunca hemos oído hablar de la web 1.0 ni de la 2.0, ¿qué pasó con ellas y cómo es que ya estamos en la web 3.0?”.

Dudando de si nos habíamos perdido algo importante y sin tener ni idea de qué era la web 1.0 o la web 2.0, sentíamos que habíamos encontrado accidentalmente una copia de la tercera película de El Señor de los Anillos sin haber vivido la magia de las dos primeras películas. El FOMO era muy fuerte, así que nos embarcamos en la tarea de indagar más sobre este tema. Por tanto, si te encuentras en una situación similar, preguntándote de qué se trata todo esto de la “web 3.0”, y si todo tiene tanto sentido para ti como intentar ver las escenas de los elfos en El Señor de los Anillos sin subtítulos, entonces has llegado al lugar correcto, ya que vamos a analizar este tema para ponernos al día.

Historia de la web

Cuando la gente habla de la web 1.0, 2.0 y 3.0, es importante aclarar que muchas personas tienen muchas explicaciones y definiciones diferentes de estos términos. Es como acercarse a 100 personas diferentes en una conferencia de criptomonedas y preguntarles qué significan las criptomonedas para ellos, seguramente cada persona dé una respuesta diferente en función de su punto de vista. No hay una descripción en la que todos estén de acuerdo, todavía no existe “un patrón universal” para estos términos.

¿Qué es la web 1.0?

Para entender qué es la web 1.0, tenemos que retroceder en el tiempo hasta los inicios de internet. Lo creas o no, internet se creó con un propósito completamente distinto al de ver vídeos de gatos, hacer compras o ver memes. Los orígenes de internet se remontan a investigaciones realizadas en la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa (DARPA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos durante 1969, donde algunas de las mentes más brillantes de todo el mundo se reunieron para trabajar en lo que inicialmente se concibió como un proyecto de comunicaciones militares. Internet inicialmente estaba compuesta por páginas web unidas por hipervínculos, con texto pero sin ningún tipo de imágenes, además estas páginas eran de “sólo lectura” y no había posibilidad de interactuar con ningún elemento de forma significativa. Básicamente, la primera internet era un gigantesco depósito de libros electrónicos.

La web 1.0 se convirtió en un recurso increíble para compartir información y las principales ramas del gobierno americano, laboratorios de investigación, centros educativos e instituciones que accedían a las páginas web compartían información cuando podían conectarse a través de servidores comerciales. La gente se conectaba principalmente para leer, ya que no había funcionalidad de lectura/escritura y gran parte del contenido que estaba en internet se generaba primero fuera de línea antes de ser compartido. No sería hasta unos años más tarde cuando se implementaría una funcionalidad básica de chat a través de un sistema de tablones de anuncios (BBS, por sus siglas en inglés) que permitiría la interacción entre usuarios.

Eventualmente, las URL dinámicas y otras innovaciones harían evolucionar las capacidades de internet, pasando de la web 1.0 a la 2.0. La transición entre estas fue un proceso gradual que tuvo lugar a lo largo del tiempo, ya que se añadieron nuevas características y funciones sobre las infraestructuras ya existentes, por lo que no hay una definición clara o un marco temporal para determinar cuando la web 1.0 se convirtió oficialmente en la web 2.0. Un dato que nos ha parecido interesante, y que deberías mencionar en tu próxima reunión si quieres impresionar a alguien, es que la publicidad estaba prohibida en la web 1.0 y tuvieron que pasar unos cuantos años hasta que se permitiera la existencia de algún tipo de publicidad en internet. Algo difícil de imaginar hoy en día.

Cómo eran los sitios Web durante la web 1.0. Imagen vía The Finanser

¿Qué es la web 2.0?

La web 2.0 es donde todo se pone emocionante y es básicamente la internet tal y como lo conocemos en la actualidad, con todos nuestros sitios de compras favoritos, plataformas de streaming de vídeo, criptomonedas, videojuegos, redes sociales, ¡lo que sea! Un ejemplo sencillo que podría ayudarte a visualizar la transición de la web 1.0 a la 2.0 es el funcionamiento de una tienda de comercio electrónico. Una tienda de comercio electrónico construida en la web 1.0 habría sido como una revista con algunas imágenes básicas y algo de texto en el que un usuario podría desplazarse y leer, y eso sería todo. La web 2.0 es la que ha permitido agregar todas las integraciones y funciones adicionales, como la posibilidad de añadir artículos al carrito de la compra, pasar por caja, pagar con una tarjeta de crédito y dejar una reseña para que otros la lean. La web 2.0 también trajo consigo la revolución de los contenidos generados por los usuarios, en la que usuarios como nosotros podemos crear contenidos y publicarlos en internet, como este artículo, o esos bochornosos y desagradables mensajes de Facebook de cuando estábamos en el instituto. ¿Quién se acuerda de MySpace?

El concepto de web 2.0 fue acuñado en 2004 por el pionero de la web Dale Dougherty, vicepresidente de O’Reilly (la empresa de medios de comunicación, no la tienda de repuestos de automóviles). La web 2.0 se conoce a menudo como “web social”, “web de la sabiduría”, “web centrada en las personas”, “web participativa” y “web de lectura/escritura”, ya que permitió por primera vez a la humanidad compartir información, socializar y transmitir fácilmente sabiduría (o vídeos de gatos) a cualquier parte del mundo de forma casi instantánea. Esta era marcó el comienzo de los contenidos generados por los usuarios a una escala que nunca antes había sido posible gracias a blogs, vídeos compartidos, chats, mensajes de voz, correos electrónicos y publicaciones en las redes sociales. La “web social” alcanzó una adopción a escala masiva más rápidamente que cualquier otro avance tecnológico de la historia y ha mantenido esa posición hasta que apareció el Bitcoin unos años más tarde.

Uno de los factores clave que impulsaron el desarrollo de la web 2.0 fue el desarrollo de tecnologías de nueva generación relacionadas con la Web. Ajax, JavaScript, las hojas de estilo en cascada (CSS), el Modelo de Objetos para la representación de Documentos (DOM), el HTML extensible (XHTML), las transformaciones XSL (XSLT)/XML y Adobe Flash, son desarrollos que proporcionaron a los usuarios una forma inmersiva y entretenida de interactuar con las  páginas web. Al igual que sucedió con la transición gradual entre la web 1.0 y la web 2.0, ya estamos en plena transición hacia la web 3.0.

Ejemplo de uno de los factores diferenciadores entre la web 1.0 y la 2.0. Imagen vía Myeltcafe

¿Qué es la web 3.0?

El concepto de web 3.0 no es nuevo, ya que los primeros pioneros que estuvieron presentes en este ámbito desde la transición de la web 1.0 a la web 2.0 tuvieron la previsión de saber que la evolución a la web 3.0 ocurriría eventualmente, al igual que en la actualidad ya se habla de la web 4.0 y 5.0, aunque apenas estemos entrado en la web 3.0. El primer concepto de web 3.0 proviene de Tim Bernes-Lee, un informático británico al que se le atribuye la invención de la World Wide Web, quien acuñó el concepto de web 3.0 en 1999. Así como la web 2.0 se denomina a menudo “web social”, la web 3.0 se denomina a menudo como la “web semántica”.

Bernes-Lee tuvo la visión de que la web semántica sería capaz de analizar todos los datos de internet, permitiendo a las máquinas realizar muchas tareas sin necesidad de intervención humana. Gran parte de las capacidades que desarrollaría Internet y que Lee había imaginado en 1999 ya se han hecho realidad, aunque una denominación más reciente de lo que comprendería la web 3.0 fue publicada en 2006 por John Markoff, del New York Times. En lugar de la “web semántica”, Markoff se referiría a la web 3.0 como “la web inteligente”, y afirma que tendría 5 características.

Las 5 características de la web inteligente:

  1. Web semántica: la web 3.0 va más allá de centrarse en palabras clave y valores numéricos para entender contenidos como fotos, vídeos o audio y asociaciones más complejas entre productos, lugares y comportamientos específicos.

  2. Inteligencia artificial: el software de inteligencia artificial es capaz de interpretar el lenguaje natural y entender la intención que se da a las palabras. También puede reconocer lo real de lo falso y proporcionar datos más confiables.

  3. Gráficos 3D: la tercera generación de internet debe integrar el uso de gráficos 3D y tecnologías de realidad virtual para proporcionar resultados sobre lugares de la vida real, productos diversos y objetos de interés.

  4. Conectividad: dentro de la web 3.0, la información está más conectada a través de metadatos semánticos, aprovechando toda la información disponible.

  5. Omnipresencia: Se eliminan los silos de datos: todos los dispositivos deben estar conectados a la red y el contenido es operable por diferentes aplicaciones.

Está claro que estas cinco características están evolucionando y dando forma al internet que conocemos. Los avances tecnológicos se están produciendo en cada una de esas áreas para crear una versión de internet más avanzada que la que utilizamos hoy.

Diferencias entre la web 1.0, 2.0 y 3.0. Imagen vía geeksforgeeks

Una de nuestras descripciones favoritas de internet dice que esta es la totalidad del conocimiento combinado de la humanidad accesible a todo el mundo. La web 3.0 promete establecer el acceso a esta información de una manera más razonable de lo que es posible con las limitaciones que existen dentro del actual esquema de empresas como Google. La web 3.0 necesita el uso de lenguajes ontológicos declarativos como el Web Ontology Language (OWL) para producir ontologías específicas del dominio que las máquinas puedan utilizar para realizar razonamiento inteligente y así puedan sacar conclusiones y no sólo cotejar palabras clave, permitiendo a las máquinas procesar el contenido de una manera más humana.

Microsoft está realizando avances en el sector de la realidad virtual, la realidad aumentada y el metaverso, llevando a la web 3.0 hacia la adopción generalizada. Imagen vía Microsoft

Pero, ¿qué tiene que ver la web 3.0 con la tecnología de cadena de bloques y las criptomonedas?

Por primera vez en la historia de la humanidad, la tecnología de cadena de bloques proporciona un mecanismo de confianza que se basa puramente en matemáticas claramente definidas e indiscutibles, en lugar de la errónea, frágil y emocionalmente sesgada naturaleza humana. Esto permite agregar confianza e integridad a los sistemas y a las funciones críticas que dirigen nuestra vida diaria. Ya confiamos en las calculadoras por encima de nuestras propias capacidades aritméticas mentales, la cadena de bloques se encuentra en una situación similar, aunque con la posibilidad de impactar muchas áreas de nuestras vida, incluyendo casos de uso que abarcan diversos sectores, como las finanzas, la atención médica, la logística de cadenas de suministros, los videojuegos, la agricultura y muchos otros sectores. La tecnología de cadena de bloques ya se está entrelazando con la web 2.0 tradicional y ya se está construyendo un marco de trabajo de la web 3.0 totalmente independiente en redes como Ethereum.

Evolución de la web. Imagen vía medium.com/fabric-ventures

El auge de tecnologías como los registros distribuidos y la cadena de bloques permiten la descentralización de los datos y la creación de un entorno para las transmisiones y transacciones de datos de manera segura, transparente, verificable y a prueba de manipulaciones. La integración de la cadena de bloques en la web 3.0 permitirá superar problemas actuales de la web 2.0 como la centralización, la vigilancia y la publicidad explotadora/manipuladora, a la vez que proporcionará el marco para soportar una infraestructura descentralizada que tendrá la capacidad de desplazar a los gigantes tecnológicos centralizados, lo que hará que los individuos sean legítimamente dueños de sus propios datos.

Algunas de las ventajas de la cadena de bloques y la tecnología de registros distribuidos. Imagen vía medium.com/kalyanicynixit

Si la web 3.0 adopta y utiliza la tecnología y la infraestructura de cadena de bloques de forma descentralizada a escala masiva, permitirá a las personas ser verdaderamente autónomas, ser dueñas y controlar quién se beneficia del tiempo que invierten en línea. Una web descentralizada permitirá a los usuarios dictar cómo desean ser compensados por su tiempo y sus datos, eliminando las prácticas poco éticas de los gigantes tecnológicos que se benefician obteniendo miles de millones de dólares cada año de la explotación de los datos de los usuarios.

Estamos viendo los primeros avances en este ámbito y ya son millones los usuarios (entre los que nos incluimos) que han migrado sus navegadores de Google Chrome al navegador Brave, que incorpora elementos de la web 3.0 y que cuenta con capacidades de la tecnología de cadena de bloques que le permite compensar a los usuarios de forma justa por su tiempo, viendo anuncios, u optando por desactivar las cookies de seguimiento y los anuncios por completo, liberándolos de las prácticas de vigilancia y manipulación de los gigantes tecnológicos.

El navegador Brave elimina el comportamiento acosador de la navegación web. Imagen vía bitpartikel

Es importante aclarar que la web 3.0 no implica automáticamente que haya descentralización, por lo que va a ser muy difícil que este sueño utópico que tienen millones de personas se haga realidad.

La web 3.0 y la descentralización

Como hemos mencionado anteriormente, la web 3.0 y la tecnología de cadena de bloques se utilizan a menudo como sinónimos, lo que puede ser engañoso y no es exactamente correcto. No existe nada en el marco tecnológico de la web 3.0 que establezca que tenga que utilizar ni construirse sobre la tecnología de cadena de bloques. Aunque creemos que es justo suponer que la tecnología de cadena de bloques seguirá desarrollándose, integrándose y desempeñando un papel importante en la web 3.0, como ya hemos visto que ocurre en muchos sectores.

Las redes de la web 3.0, como Ethereum, tienen la capacidad de descentralizar prácticamente todos los sectores. Imagen vía prsarahevans.com

Esto nos lleva a otra interpretación errónea que tienen muchas personas y es que muchas asumen que la tecnología de cadena de bloques significa automáticamente descentralización. Es decir, mucha gente tiene la suposición incorrecta de que la suma de la web 3.0 con la tecnología de cadena de bloques es igual a descentralización, lo cual no es correcto. Al contrario, ¡podría ser lo opuesto!

Aunque muchos apreciamos que la tecnología de cadena de bloques tenga la capacidad de crear un marco descentralizado y que funcione realmente entre pares, la tecnología de cadena de bloques también puede conducir a la pérdida de libertades y de la descentralización, haciendo que se implemente un control autoritario y una centralización con esteroides. Esta es la razón por la que una de las mayores preocupaciones en el sector es que se creen criptomonedas digitales respaldadas y controladas por gobiernos (CBDCs). Asegúrate de ver este video de Coin Bureau del por qué esta es una preocupación tan grave compartida por muchas personas. Esto nos lleva al siguiente segmento, y es, “el problema”.

Industrias que están liderando la adopción de la cadena de bloques. Imagen vía The Blockchain Academy

¿Por qué impulsar una web 3.0 descentralizada?

Aunque la cadena de bloques tiene la capacidad de liberarnos de los regímenes autoritarios y de los gigantes tecnológicos que vigilan y manipulan todos los aspectos de nuestra presencia en línea, también tiene la capacidad de ponernos bajo el control de los gobiernos. Si un gobierno decidiera eliminar el dinero en efectivo y utilizar únicamente una moneda digital de banco central o adoptar una infraestructura en internet centralizada, podría tener control total de cada céntimo que entra en tu cuenta bancaria, vigilar cada céntimo que gastas, rastrear cada una de las compras que haces o los sitios web que visitas. En un escenario extremo, pero posible, los gobiernos podrían incluso tener un control total sobre la información a la que una nación puede acceder en internet o controlar todo el suministro monetario. Suena como un mundo en el que ciertamente no nos gustaría vivir. ¿A alguien más le suena a 1984 de George Orwell?

“El Gran Hermano te vigila”. El aterrador clásico de George Orwell sobre la manipulación y el control del gobierno en la famosa novela 1984. Imagen vía massacinzentadotblog

Muchas personas podrán estar leyendo esto y pensar, “bueno, yo no hago nada ilegal ni tengo nada que ocultar”, pero no se trata sólo de cumplir la ley. Esto podría dar al gobierno el poder de restringir libertades básicas a las que estamos acostumbrados. ¿Quieres asistir a una protesta o hablar de algo en lo que crees? En ese caso, un gobierno podría intervenir y bloquear los fondos de tu cuenta durante un mes por algo tan insignificante como que no te guste una publicación política en las redes sociales. ¿Y si decidieran que todos los adultos sólo pueden tomar dos cervezas a la semana? (¡Trágico!) Podrían bloquear automáticamente los pagos de cualquier compra relacionada con el alcohol. Si centralizaran y controlarán el acceso a internet, seguramente bloquearían un artículo como éste y te impedirían leerlo, reprimiendo la libertad de expresión de forma similar a como sucede en Corea del Norte y China. ¿Hemos pintado ya un panorama lo suficientemente sombrío? Creemos que ya lo has entendido.

Por si esto no fuera suficiente para impulsar una web 3.0 descentralizada, como ya hemos mencionado brevemente, muchas de los procesos de los gigantes tecnológicos son francamente espeluznantes y poco éticos, están dañando a la sociedad al fomentar las divisiones sociales entre puntos de vista opuestos, y manipulando los resultados de eventos importantes como elecciones o el Brexit. Las grandes empresas tecnológicas han sobrepasado los límites y nos están afectando a todos. Se han publicado muchos artículos sobre cómo los gigantes de las redes sociales están explotando y socavando la democracia. Recientemente han salido a la luz algunos documentos reveladores y profundamente perturbadores que muestran cómo las personas son utilizadas como ganado, siendo manipuladas y explotadas por grandes empresas tecnológicas como Facebook, Google y Amazon. Se ha descubierto que Facebook (que también es dueña de Instagram) ha estado compartiendo y vendiendo secretamente nuestra información privada a terceros para la creación de perfiles psicográficos de usuarios para influir en las campañas políticas o para su venta a empresas de marketing y publicidad para que puedan aprovechar esa información para dirigirnos a la publicidad.

Los gigantes de las redes sociales filtraron información privada engañando a la opinión popular e influyendo en los resultados del Brexit y las elecciones políticas. Imagen vía Cnet

Estos actos poco éticos de Facebook han hecho que la empresa se vea envuelta en situaciones controvertidas, lo que la ha llevado a tribunales en múltiples ocasiones. Facebook ha sido acusada y juzgada por algunos de los peores delitos que existen en nuestra sociedad, como la propagación de discursos de odio que alimentaron genocidios, por crímenes de guerra en Myanmar o por abusos a los derechos humanos, lo que ha impulsado la creación de múltiples movimientos “anti Facebook” en todo el mundo. Si aún no has visto los documentales “The Social Dilemma” o “The Creepy Line“, sobre cómo las redes sociales y los gigantes de la tecnología están manipulando a la sociedad, te los recomendamos para que entiendas las intenciones de muchas de estas empresas con las que interactuamos a diario. Intenta verlos sin tirar tu ordenador por la ventana por el miedo, el asco y la rabia que producen, allí entenderás por qué la descentralización es tan importante.

Google tiene el poder de manipular los resultados políticos y económicos. Imagen vía usnews.com

A medida que descubrimos más y más acerca de los engaños que hay detrás de algunos de estos gigantes tecnológicos y cómo estamos siendo manipulados, comprendemos por qué la gente está furiosa y en búsqueda de una alternativa. Esto está dando lugar a uno de los factores que impulsan la revolución y la adopción de una web 3.0 descentralizada basada en la tecnología de cadena de bloques.

Implementaciones actuales de la web 3.0

Como hemos mencionado anteriormente, la web 3.0 no significa necesariamente que esté integrada con la tecnología de cadena de bloques, pero para el resto de este artículo vamos a trabajar bajo la suposición de que estos dos sectores se están desarrollando y están siendo explotados en conjunto, por lo  que en cada mención de la web 3.0 se debe asumir que se incluye a la cadena de bloques en el marco de internet. Las tecnologías de cadena de bloques como Bitcoin, o más aún, Ethereum, ya están proporcionando el marco inicial y básico necesario para la web 3.0 y hemos visto muchos casos de uso ya implementados y construidos sobre esta innovación tecnológica. ¿Recuerdas que internet fue la innovación tecnológica que más rápido se ha adoptado? Pues, la adopción que han tenido las criptomonedas y la tecnología de cadena de bloques está superando la adopción que tuvo internet en sus inicios, lo que significa que ya está presente de muchas maneras en nuestras vidas y probablemente continuará su crecimiento exponencial en todos los ámbitos de la vida de los usuarios de internet.

La adopción de las criptomonedas es la más rápida de la historia de la humanidad, y se está implementando en finanzas, salud, redes sociales, sitios de streaming de vídeo, alimentación y agricultura, y prácticamente en todos las industrias del mundo. Imagen vía Chaindebrief

La tecnología de cadenas de bloques ha tenido su mayor impacto en el sector de las finanzas y por una buena razón. Tras los innumerables escándalos y negocios sucios que han existido en el sector de las finanzas tradicionales desde la creación del propio sistema monetario, la tecnología de cadena de bloques y la web 3.0, gracias a redes como Ethereum, han proporcionado un marco que está reemplazando la confianza que se ha perdido en el sector financiero tradicional, ayudando a eliminar la corrupción, reduciendo los costos y aumentando la eficiencia mediante la reconstrucción de aplicaciones financieras que tienen el potencial de reemplazar todos los servicios tradicionales que existen actualmente.

La DeFi está proporcionando una evolución muy esperada al anticuado y corrupto sistema financiero tradicional. Imagen vía nimera.io

Las aplicaciones financieras descentralizadas como Aave ya están proporcionando muchos de los servicios de los bancos tradicionales, permitiendo a los usuarios prestar sus criptomonedas para ganar intereses y pedir prestado dinero contra sus posesiones de criptomonedas, un método que funciona mucho mejor que el que ofrecen los bancos. Las aplicaciones financieras descentralizadas ya están proporcionando a los usuarios la capacidad de pedir préstamos con garantías, prestar, invertir, obtener hipotecas e incluso comprar seguros casi instantáneamente, evitando la burocracia y las restricciones impuestas por los bancos, y sin necesidad de pagar comisiones y tasas de interés exorbitantes. El concepto de un sistema financiero P2P es realmente sorprendente.

Los usuarios de la DeFi disfrutan de una rentabilidad pasiva de entre el 1.5% y el 10% mensual, muy superior a la que ofrecen los bancos. Imagen vía Defipulse

La gente se ha cansado de que los bancos ganen miles de millones a costa de sus clientes, ofreciendo muy poco a cambio, a menos que estés contento con el 0.01% de interés que te pagan en tus cuentas de ahorro mientras te cobran un 20% de interés por usar sus tarjetas de crédito, por lo que millones de usuarios han recurrido a las Finanzas Descentralizadas (DeFi) para disfrutar de rendimientos muy superiores a los que se ofrecen en las finanzas tradicionales. Podríamos hablar mucho de lo superior que es la DeFi a las finanzas tradicionales, pero para evitar enredos, puedes aprender más sobre la DeFi aquí. Al momento de escribir este artículo, existen más de 100.000 millones de dólares bloqueados en los protocolos de la DeFi, y estos millones de usuarios están disfrutando de mayores rendimientos, menos trámites, menos burocracia y de mejores oportunidades para alcanzar un nivel de salud financiera con el que los bancos nunca podrán competir. La adopción de la DeFi es una tendencia que ha visto un crecimiento exponencial, y es una tendencia que se espera que continúe a medida que las generaciones más jóvenes confíen más de su riqueza a la tecnología de cadena de bloques y a aplicaciones de la DeFi y no al sistema financiero tradicional.

El número de usuarios de la DeFi aumenta a un ritmo exponencial. Imagen vía dune analytics

La web 3.0 también está borrando las líneas entre la realidad física y la realidad digital, lo que está teniendo un gran impacto en las industrias de los videojuegos, la moda y la medicina. Seguro que en las últimas semanas has oído hablar del “metaverso“, ya que Facebook y Microsoft se han involucrado a lo grande, invirtiendo miles de millones de dólares en la creación de sus propios mundos virtuales, además algunos metaversos descentralizados como Decentraland, The Sandbox y Bloktopia han estado apareciendo en todo YouTube. La web 3.0 y la cadena de bloques están afectando a la multimillonaria industria de los videojuegos y han creado un panorama económico completamente nuevo que utiliza el  modelo de “jugar para ganar“ que podría alterar nuestro sistema económico actual, como hemos cubierto repetidamente aquí, aquí y aquí. Algunas tecnologías como la realidad virtual, la realidad aumentada y el metaverso ya están en funcionamiento, y apenas estamos en los inicios de la web 3.0

La desaparición de los límites entre la realidad y el entorno virtual se está conociendo como “web espacial”, que será un desarrollo que irá más allá de la web 3.0 y que contará con capacidades mejoradas de geolocalización, tecnologías de realidad virtual, realidad aumentada y metaversos totalmente inmersivos, que serán tan realistas que no se podrá distinguir entre lo virtual y lo real. Aunque la web espacial es demasiado compleja para analizarla aquí, será esencialmente un mapa hiperrealista de todo nuestro mundo que incluirá todos los aspectos de la vida (aparte de la vida real) de manera conectada e interactiva. Deloitte publicó un fantástico artículo en profundidad sobre el concepto de la web espacial aquí.

Mapa de la web espacial. Imagen vía Deloitte

Por qué es importante todo esto

La transición a la web 3.0 es una evolución tecnológica inevitable, y nos brindará la capacidad para construir o incorporar la tecnología de cadena de bloques en nuestras vidas y así convertirse en una revolución “popular” dentro de esta evolución tecnológica. Muchos economistas y tecnólogos se han referido a la tecnología de cadena de bloques como “la cuarta revolución industrial”, y se han escrito, publicado y estudiado extensamente en los círculos académicos y empresariales documentos fantásticos como el titulado “Dando forma a la cuarta revolución industrial” de Klaus Schwab, fundador y presidente ejecutivo del Foro Económico Mundial, con un prólogo de Satya Nadella, director general de Microsoft. El Parlamento Europeo también publicó un artículo de 28 páginas titulado “Cómo la tecnología de cadena de bloques podría cambiar nuestras vidas“, que puedes leer si quieres profundizar en el tema, ya que un solo artículo no podría hacer suficiente justicia a la innovación que hay detrás de la tecnología de cadena de bloques. Si esta tecnología es lo suficientemente disruptiva como para llamar la atención del Foro Económico Mundial y de funcionarios gubernamentales de todo el mundo, merece la pena conocerla.

Muchas personas ¿apoyan esta revolución, puesto que proporciona un rayo de esperanza de tener un futuro donde contemos con una infraestructura descentralizada P2P, sin terceros de confianza, que puede soportar sistemas monetarios, sistemas de salud y cualquier sistema de infraestructuras, además de la libre transmisión de información, sin sesgos o manipulaciones, ya que estas infraestructuras y sistemas no serán controlados por ninguna autoridad central que implemente sus agendas, liberándonos efectivamente de los grilletes de los gobiernos e instituciones que prefieren beneficios y no les importa la vida humana.

También hay personas que sienten que esto es un sueño imposible, una visión utópica, posiblemente anárquica y libertaria, que probablemente nunca se hará realidad, pues esos mismos regímenes autoritarios de los que la gente quiere salvarse también están adoptando y utilizando la tecnología de la cadena de bloques y la web 3.0 para adaptarse y cambiar con estas innovaciones, sin permitir que sean reemplazados o se vuelvan redundantes, lo que también es un escenario muy probable. Cualquiera de los dos escenarios nos parecen posibles, pues puede no ser tan utópico como a muchos les gustaría, e incluso podría ser una solución a los problemas actuales que existen en la web 2.0.

Mientras algunos sueñan con una utopía de la cadena de bloques, otros temen un régimen autoritario con la cadena de bloques, pero despojémonos de los prejuicios, las esperanzas y los temores y veamos los hechos. Independientemente del futuro que creas que tendrá la cadena de bloques y la web 3.0, esta tecnología  tiene algunos beneficios importantes y un potencial casi ilimitado, sólo limitado principalmente por la innovación y la imaginación humana.

Algunos de los beneficios de la web 3.0. Imagen vía hackernoon

El rasgo clave que define a la web 3.0 es que no será un sistema utópico, no será un sistema descentralizado, o un sistema monetario P2P o cualquier otro tipo de sistema o infraestructura, tampoco será la inmersión total en un metaverso virtual. Aunque todas esas son características, rasgos y productos potenciales de la web 3.0, el rasgo clave que la define será simplemente la verificabilidad. Independientemente de lo que representa la futura web 3.0, lo que trascenderá será que todos los resultados posibles, que cada dato de cada transacción que se produzcan en la cadena de bloques será a prueba de manipulaciones, tendrá una marca de tiempo y se registrará públicamente para que cualquiera pueda verificar y autenticar la transmisión de los datos. Esta es la característica más impactante de esta tecnología. Cuando las transacciones son públicamente verificables ya no hay necesidad de confiar en que alguien está diciendo la verdad, ya que todo será 100% transparente en la cadena de bloques.

Actualmente no tenemos ni idea de lo que ocurre con nuestros datos o identidades mientras seguimos pasando más tiempo y subiendo más información a internet, ¿a dónde va esa información y cómo se utiliza? La web 3.0 añadirá una capa de transparencia y honestidad necesaria, y obligará a todos a ser más éticos y morales de lo que son en la actualidad. Si combinamos la verificabilidad con la funcionalidad de los contratos inteligentes construidos sobre esa tecnología, estaremos viviendo en una sociedad en la que todo funcionará con precisión, eliminando la desconfianza, la intervención de terceros, la manipulación, el engaño y el error humano en innumerables escenarios.

La tecnología de cadena de bloques puede proporcionar la transparencia necesaria para que vivir en el “Meta” de Mark Zuckerberg sea un poco menos espeluznante. Imagen vía New York Times.

La web 3.0 ampliará fundamentalmente el alcance de lo que es posible entre las interacciones humanas y las máquinas y ampliará las redes de pago P2P existentes, los flujos de información serán más ricos y habrá confianza en las transferencias de datos, como las que ya disfrutan los usuarios de las criptomonedas en la actualidad. Esta revolución tecnológica apoyará la aparición de nuevos modelos económicos y empresariales, como el empoderamiento de grupos cooperativos globales, las organizaciones autónomas descentralizadas y los mercados autosuficientes y autogobernados. Esto es significativo porque:

Las sociedades se volverán más eficientes al transferir el valor entre iguales, pudiendo eliminar los intermediarios, y devolviendo el valor directamente a los compradores y proveedores en un mercado. Uno de nuestros proyectos favoritos que ya se está desarrollando en este ámbito es Authentium, que utiliza la tecnología de cadena de bloques para eliminar a intermediarios, a menudo explotadores, de la industria de la cadena de suministro, permitiendo que los agricultores y los trabajadores agrícolas que trabajan duro cada día para alimentar al planeta puedan obtener mayores beneficios.

La propiedad mutua y la gobernanza de los sistemas descentralizados pueden permitir la colaboración y la incentivación a través de nuevos modelos económicos para resolver problemas complejos y sofisticados.

Las personas serán dueñas de sus propios datos, que ya no se venderán al mejor postor sin su consentimiento.

La descentralización resolverá el problema de la dependencia de plataformas o de empresas, lo que permite “asegurar el futuro” de las empresas, los negocios y las inversiones.

La mejora de las medidas de seguridad, verificación y validación a medida que los humanos, las empresas y las máquinas comparten información.

Conclusiones

Aunque es posible que la web 3.0 no cause la revolución popular que muchos esperan, no podemos negar que la tecnología de cadena de bloques seguirá desempeñando un papel importante en todas las industrias relacionadas con internet. Esto ya es bastante evidente teniendo en cuenta que los gobiernos y los gigantes de la tecnología están invirtiendo miles de millones de dólares en infraestructura de cadena de bloques. Mientras que la web 3.0 nos llevará a un futuro que mezclará la realidad con la realidad virtual e incorporará aspectos de aprendizaje automático e inteligencia artificial para hacer que nuestras interacciones con nuestros dispositivos sean más humanas, la cadena de bloques añadirá una propuesta muy interesante a lo que será posible tanto en nuestras vidas digitales como físicas.

El auge de las organizaciones autónomas descentralizadas (DAOs) construidas sobre la cadena de bloques es una propuesta interesante, ya que empresas importantes como Atari buscan ceder el control de una parte de su negocio a la comunidad y muchos otros equipos como Uniswap y Compound Finance están buscando ceder el control total de su negocio a su comunidad. Las DAOs están proporcionando quizás el modelo de negocio más justo y democrático que la humanidad ha disfrutado.

Diagrama simple que compara una DAO con una jerarquía empresarial tradicional. Imagen vía medium.com/smartz-blog

La integración de la cadena de bloques en la web 3.0 también está transformando por completo el modelo económico del planeta tal y como lo conocemos, ya que miles de millones de dólares se están destinando a plataformas financieras descentralizadas, sacando dinero del sector bancario, de las inversiones y de los métodos de inversión tradicionales, como el oro y las propiedades inmobiliarias. Muchos estrategas e inversores en este ámbito, como Raoul Pal y Michael Saylor, se refieren a esta revolución como “la mayor transferencia de riqueza en la historia de la humanidad” y un artículo de Yahoo afirma que el 47% de los millennials millonarios tienen al menos el 25% de su riqueza en criptomonedas. Estos millennials son los innovadores y visionarios del mañana, así que, si ellos creen en la cadena de bloques ahora, es probable que la incorporen a sus futuros negocios, o que las empresas integren esta tecnología para atraer a las generaciones más jóvenes, fomentando el desarrollo de la cadena de bloques junto con la web 3.0. Curiosamente, el presidente de la SEC de Estados Unidos, Gary Gensler, también ha admitido recientemente que el Bitcoin compite directamente con el sistema bancario estadounidense.

El Bitcoin ha sido el activo de mayor rendimiento de la década, desviando miles de millones de dólares de los mercados tradicionales. Imagen vía Yahoo

Aunque todavía no se sabe si la web 3.0 nos librará de las atrocidades que actualmente experimentamos en la actual forma de la web 2.0, esta web es la mejor oportunidad que tenemos, lo que nos llena de esperanzas para el futuro. Algunas redes como Bitcoin y Ethereum seguirán proporcionando a los usuarios un refugio frente a los ataques a los que todos nos enfrentamos durante nuestras actuales interacciones cotidianas en la web 2.0. Puede que la web 3.0 no “aplaste” y reemplace el sistema actual, pero tiene una gran oportunidad de solucionar muchos de los aspectos que están rotos en cuanto a centralización, vigilancia, monetización de los datos humanos y del hecho de que los seres humanos sean tratados como ciudadanos de segunda clase por nuestros bancos, las grandes empresas tecnológicas y, a menudo, nuestros gobiernos. Nos gusta mucho la frase que dice, “la tecnología de cadena de bloques puede no ser el fin de todo, pero es la mejor oportunidad que tenemos”, y el potencial que la integración de cadena de bloques tiene para impactar todos los aspectos de nuestras vidas a medida que nos aventuramos en la web 3.0 es enorme.

Aviso: Estas son las opiniones del autor y no deben ser consideradas como consejos de inversión. Los lectores deben hacer su propia investigación.

El artículo What is Web 3.0 and Why it Has Insane Potential fue publicado por primera vez en Coin Bureau.

“Web 3.0” es una de esas palabras de moda que ha estado circulando por las profundidades de internet durante los últimos años y que a menudo se utiliza como sinónimo de la tecnología de cadena de bloques. Cuando empezamos a ver el término web 3.0 en varias publicaciones y artículos no entendíamos del todo a qué se referían. También pensamos: “¿Web 3.0? Nunca hemos oído hablar de la web 1.0 ni de la 2.0, ¿qué pasó con ellas y cómo es que ya estamos en la web 3.0?”.

Dudando de si nos habíamos perdido algo importante y sin tener ni idea de qué era la web 1.0 o la web 2.0, sentíamos que habíamos encontrado accidentalmente una copia de la tercera película de El Señor de los Anillos sin haber vivido la magia de las dos primeras películas. El FOMO era muy fuerte, así que nos embarcamos en la tarea de indagar más sobre este tema. Por tanto, si te encuentras en una situación similar, preguntándote de qué se trata todo esto de la “web 3.0”, y si todo tiene tanto sentido para ti como intentar ver las escenas de los elfos en El Señor de los Anillos sin subtítulos, entonces has llegado al lugar correcto, ya que vamos a analizar este tema para ponernos al día.

Historia de la web

Cuando la gente habla de la web 1.0, 2.0 y 3.0, es importante aclarar que muchas personas tienen muchas explicaciones y definiciones diferentes de estos términos. Es como acercarse a 100 personas diferentes en una conferencia de criptomonedas y preguntarles qué significan las criptomonedas para ellos, seguramente cada persona dé una respuesta diferente en función de su punto de vista. No hay una descripción en la que todos estén de acuerdo, todavía no existe “un patrón universal” para estos términos.

¿Qué es la web 1.0?

Para entender qué es la web 1.0, tenemos que retroceder en el tiempo hasta los inicios de internet. Lo creas o no, internet se creó con un propósito completamente distinto al de ver vídeos de gatos, hacer compras o ver memes. Los orígenes de internet se remontan a investigaciones realizadas en la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa (DARPA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos durante 1969, donde algunas de las mentes más brillantes de todo el mundo se reunieron para trabajar en lo que inicialmente se concibió como un proyecto de comunicaciones militares. Internet inicialmente estaba compuesta por páginas web unidas por hipervínculos, con texto pero sin ningún tipo de imágenes, además estas páginas eran de “sólo lectura” y no había posibilidad de interactuar con ningún elemento de forma significativa. Básicamente, la primera internet era un gigantesco depósito de libros electrónicos.

La web 1.0 se convirtió en un recurso increíble para compartir información y las principales ramas del gobierno americano, laboratorios de investigación, centros educativos e instituciones que accedían a las páginas web compartían información cuando podían conectarse a través de servidores comerciales. La gente se conectaba principalmente para leer, ya que no había funcionalidad de lectura/escritura y gran parte del contenido que estaba en internet se generaba primero fuera de línea antes de ser compartido. No sería hasta unos años más tarde cuando se implementaría una funcionalidad básica de chat a través de un sistema de tablones de anuncios (BBS, por sus siglas en inglés) que permitiría la interacción entre usuarios.

Eventualmente, las URL dinámicas y otras innovaciones harían evolucionar las capacidades de internet, pasando de la web 1.0 a la 2.0. La transición entre estas fue un proceso gradual que tuvo lugar a lo largo del tiempo, ya que se añadieron nuevas características y funciones sobre las infraestructuras ya existentes, por lo que no hay una definición clara o un marco temporal para determinar cuando la web 1.0 se convirtió oficialmente en la web 2.0. Un dato que nos ha parecido interesante, y que deberías mencionar en tu próxima reunión si quieres impresionar a alguien, es que la publicidad estaba prohibida en la web 1.0 y tuvieron que pasar unos cuantos años hasta que se permitiera la existencia de algún tipo de publicidad en internet. Algo difícil de imaginar hoy en día.

Cómo eran los sitios Web durante la web 1.0. Imagen vía The Finanser

¿Qué es la web 2.0?

La web 2.0 es donde todo se pone emocionante y es básicamente la internet tal y como lo conocemos en la actualidad, con todos nuestros sitios de compras favoritos, plataformas de streaming de vídeo, criptomonedas, videojuegos, redes sociales, ¡lo que sea! Un ejemplo sencillo que podría ayudarte a visualizar la transición de la web 1.0 a la 2.0 es el funcionamiento de una tienda de comercio electrónico. Una tienda de comercio electrónico construida en la web 1.0 habría sido como una revista con algunas imágenes básicas y algo de texto en el que un usuario podría desplazarse y leer, y eso sería todo. La web 2.0 es la que ha permitido agregar todas las integraciones y funciones adicionales, como la posibilidad de añadir artículos al carrito de la compra, pasar por caja, pagar con una tarjeta de crédito y dejar una reseña para que otros la lean. La web 2.0 también trajo consigo la revolución de los contenidos generados por los usuarios, en la que usuarios como nosotros podemos crear contenidos y publicarlos en internet, como este artículo, o esos bochornosos y desagradables mensajes de Facebook de cuando estábamos en el instituto. ¿Quién se acuerda de MySpace?

El concepto de web 2.0 fue acuñado en 2004 por el pionero de la web Dale Dougherty, vicepresidente de O’Reilly (la empresa de medios de comunicación, no la tienda de repuestos de automóviles). La web 2.0 se conoce a menudo como “web social”, “web de la sabiduría”, “web centrada en las personas”, “web participativa” y “web de lectura/escritura”, ya que permitió por primera vez a la humanidad compartir información, socializar y transmitir fácilmente sabiduría (o vídeos de gatos) a cualquier parte del mundo de forma casi instantánea. Esta era marcó el comienzo de los contenidos generados por los usuarios a una escala que nunca antes había sido posible gracias a blogs, vídeos compartidos, chats, mensajes de voz, correos electrónicos y publicaciones en las redes sociales. La “web social” alcanzó una adopción a escala masiva más rápidamente que cualquier otro avance tecnológico de la historia y ha mantenido esa posición hasta que apareció el Bitcoin unos años más tarde.

Uno de los factores clave que impulsaron el desarrollo de la web 2.0 fue el desarrollo de tecnologías de nueva generación relacionadas con la Web. Ajax, JavaScript, las hojas de estilo en cascada (CSS), el Modelo de Objetos para la representación de Documentos (DOM), el HTML extensible (XHTML), las transformaciones XSL (XSLT)/XML y Adobe Flash, son desarrollos que proporcionaron a los usuarios una forma inmersiva y entretenida de interactuar con las  páginas web. Al igual que sucedió con la transición gradual entre la web 1.0 y la web 2.0, ya estamos en plena transición hacia la web 3.0.

Ejemplo de uno de los factores diferenciadores entre la web 1.0 y la 2.0. Imagen vía Myeltcafe

¿Qué es la web 3.0?

El concepto de web 3.0 no es nuevo, ya que los primeros pioneros que estuvieron presentes en este ámbito desde la transición de la web 1.0 a la web 2.0 tuvieron la previsión de saber que la evolución a la web 3.0 ocurriría eventualmente, al igual que en la actualidad ya se habla de la web 4.0 y 5.0, aunque apenas estemos entrado en la web 3.0. El primer concepto de web 3.0 proviene de Tim Bernes-Lee, un informático británico al que se le atribuye la invención de la World Wide Web, quien acuñó el concepto de web 3.0 en 1999. Así como la web 2.0 se denomina a menudo “web social”, la web 3.0 se denomina a menudo como la “web semántica”.

Bernes-Lee tuvo la visión de que la web semántica sería capaz de analizar todos los datos de internet, permitiendo a las máquinas realizar muchas tareas sin necesidad de intervención humana. Gran parte de las capacidades que desarrollaría Internet y que Lee había imaginado en 1999 ya se han hecho realidad, aunque una denominación más reciente de lo que comprendería la web 3.0 fue publicada en 2006 por John Markoff, del New York Times. En lugar de la “web semántica”, Markoff se referiría a la web 3.0 como “la web inteligente”, y afirma que tendría 5 características.

Las 5 características de la web inteligente:

  1. Web semántica: la web 3.0 va más allá de centrarse en palabras clave y valores numéricos para entender contenidos como fotos, vídeos o audio y asociaciones más complejas entre productos, lugares y comportamientos específicos.

  2. Inteligencia artificial: el software de inteligencia artificial es capaz de interpretar el lenguaje natural y entender la intención que se da a las palabras. También puede reconocer lo real de lo falso y proporcionar datos más confiables.

  3. Gráficos 3D: la tercera generación de internet debe integrar el uso de gráficos 3D y tecnologías de realidad virtual para proporcionar resultados sobre lugares de la vida real, productos diversos y objetos de interés.

  4. Conectividad: dentro de la web 3.0, la información está más conectada a través de metadatos semánticos, aprovechando toda la información disponible.

  5. Omnipresencia: Se eliminan los silos de datos: todos los dispositivos deben estar conectados a la red y el contenido es operable por diferentes aplicaciones.

Está claro que estas cinco características están evolucionando y dando forma al internet que conocemos. Los avances tecnológicos se están produciendo en cada una de esas áreas para crear una versión de internet más avanzada que la que utilizamos hoy.

Diferencias entre la web 1.0, 2.0 y 3.0. Imagen vía geeksforgeeks

Una de nuestras descripciones favoritas de internet dice que esta es la totalidad del conocimiento combinado de la humanidad accesible a todo el mundo. La web 3.0 promete establecer el acceso a esta información de una manera más razonable de lo que es posible con las limitaciones que existen dentro del actual esquema de empresas como Google. La web 3.0 necesita el uso de lenguajes ontológicos declarativos como el Web Ontology Language (OWL) para producir ontologías específicas del dominio que las máquinas puedan utilizar para realizar razonamiento inteligente y así puedan sacar conclusiones y no sólo cotejar palabras clave, permitiendo a las máquinas procesar el contenido de una manera más humana.

Microsoft está realizando avances en el sector de la realidad virtual, la realidad aumentada y el metaverso, llevando a la web 3.0 hacia la adopción generalizada. Imagen vía Microsoft

Pero, ¿qué tiene que ver la web 3.0 con la tecnología de cadena de bloques y las criptomonedas?

Por primera vez en la historia de la humanidad, la tecnología de cadena de bloques proporciona un mecanismo de confianza que se basa puramente en matemáticas claramente definidas e indiscutibles, en lugar de la errónea, frágil y emocionalmente sesgada naturaleza humana. Esto permite agregar confianza e integridad a los sistemas y a las funciones críticas que dirigen nuestra vida diaria. Ya confiamos en las calculadoras por encima de nuestras propias capacidades aritméticas mentales, la cadena de bloques se encuentra en una situación similar, aunque con la posibilidad de impactar muchas áreas de nuestras vida, incluyendo casos de uso que abarcan diversos sectores, como las finanzas, la atención médica, la logística de cadenas de suministros, los videojuegos, la agricultura y muchos otros sectores. La tecnología de cadena de bloques ya se está entrelazando con la web 2.0 tradicional y ya se está construyendo un marco de trabajo de la web 3.0 totalmente independiente en redes como Ethereum.

Evolución de la web. Imagen vía medium.com/fabric-ventures

El auge de tecnologías como los registros distribuidos y la cadena de bloques permiten la descentralización de los datos y la creación de un entorno para las transmisiones y transacciones de datos de manera segura, transparente, verificable y a prueba de manipulaciones. La integración de la cadena de bloques en la web 3.0 permitirá superar problemas actuales de la web 2.0 como la centralización, la vigilancia y la publicidad explotadora/manipuladora, a la vez que proporcionará el marco para soportar una infraestructura descentralizada que tendrá la capacidad de desplazar a los gigantes tecnológicos centralizados, lo que hará que los individuos sean legítimamente dueños de sus propios datos.

Algunas de las ventajas de la cadena de bloques y la tecnología de registros distribuidos. Imagen vía medium.com/kalyanicynixit

Si la web 3.0 adopta y utiliza la tecnología y la infraestructura de cadena de bloques de forma descentralizada a escala masiva, permitirá a las personas ser verdaderamente autónomas, ser dueñas y controlar quién se beneficia del tiempo que invierten en línea. Una web descentralizada permitirá a los usuarios dictar cómo desean ser compensados por su tiempo y sus datos, eliminando las prácticas poco éticas de los gigantes tecnológicos que se benefician obteniendo miles de millones de dólares cada año de la explotación de los datos de los usuarios.

Estamos viendo los primeros avances en este ámbito y ya son millones los usuarios (entre los que nos incluimos) que han migrado sus navegadores de Google Chrome al navegador Brave, que incorpora elementos de la web 3.0 y que cuenta con capacidades de la tecnología de cadena de bloques que le permite compensar a los usuarios de forma justa por su tiempo, viendo anuncios, u optando por desactivar las cookies de seguimiento y los anuncios por completo, liberándolos de las prácticas de vigilancia y manipulación de los gigantes tecnológicos.

El navegador Brave elimina el comportamiento acosador de la navegación web. Imagen vía bitpartikel

Es importante aclarar que la web 3.0 no implica automáticamente que haya descentralización, por lo que va a ser muy difícil que este sueño utópico que tienen millones de personas se haga realidad.

La web 3.0 y la descentralización

Como hemos mencionado anteriormente, la web 3.0 y la tecnología de cadena de bloques se utilizan a menudo como sinónimos, lo que puede ser engañoso y no es exactamente correcto. No existe nada en el marco tecnológico de la web 3.0 que establezca que tenga que utilizar ni construirse sobre la tecnología de cadena de bloques. Aunque creemos que es justo suponer que la tecnología de cadena de bloques seguirá desarrollándose, integrándose y desempeñando un papel importante en la web 3.0, como ya hemos visto que ocurre en muchos sectores.

Las redes de la web 3.0, como Ethereum, tienen la capacidad de descentralizar prácticamente todos los sectores. Imagen vía prsarahevans.com

Esto nos lleva a otra interpretación errónea que tienen muchas personas y es que muchas asumen que la tecnología de cadena de bloques significa automáticamente descentralización. Es decir, mucha gente tiene la suposición incorrecta de que la suma de la web 3.0 con la tecnología de cadena de bloques es igual a descentralización, lo cual no es correcto. Al contrario, ¡podría ser lo opuesto!

Aunque muchos apreciamos que la tecnología de cadena de bloques tenga la capacidad de crear un marco descentralizado y que funcione realmente entre pares, la tecnología de cadena de bloques también puede conducir a la pérdida de libertades y de la descentralización, haciendo que se implemente un control autoritario y una centralización con esteroides. Esta es la razón por la que una de las mayores preocupaciones en el sector es que se creen criptomonedas digitales respaldadas y controladas por gobiernos (CBDCs). Asegúrate de ver este video de Coin Bureau del por qué esta es una preocupación tan grave compartida por muchas personas. Esto nos lleva al siguiente segmento, y es, “el problema”.

Industrias que están liderando la adopción de la cadena de bloques. Imagen vía The Blockchain Academy

¿Por qué impulsar una web 3.0 descentralizada?

Aunque la cadena de bloques tiene la capacidad de liberarnos de los regímenes autoritarios y de los gigantes tecnológicos que vigilan y manipulan todos los aspectos de nuestra presencia en línea, también tiene la capacidad de ponernos bajo el control de los gobiernos. Si un gobierno decidiera eliminar el dinero en efectivo y utilizar únicamente una moneda digital de banco central o adoptar una infraestructura en internet centralizada, podría tener control total de cada céntimo que entra en tu cuenta bancaria, vigilar cada céntimo que gastas, rastrear cada una de las compras que haces o los sitios web que visitas. En un escenario extremo, pero posible, los gobiernos podrían incluso tener un control total sobre la información a la que una nación puede acceder en internet o controlar todo el suministro monetario. Suena como un mundo en el que ciertamente no nos gustaría vivir. ¿A alguien más le suena a 1984 de George Orwell?

“El Gran Hermano te vigila”. El aterrador clásico de George Orwell sobre la manipulación y el control del gobierno en la famosa novela 1984. Imagen vía massacinzentadotblog

Muchas personas podrán estar leyendo esto y pensar, “bueno, yo no hago nada ilegal ni tengo nada que ocultar”, pero no se trata sólo de cumplir la ley. Esto podría dar al gobierno el poder de restringir libertades básicas a las que estamos acostumbrados. ¿Quieres asistir a una protesta o hablar de algo en lo que crees? En ese caso, un gobierno podría intervenir y bloquear los fondos de tu cuenta durante un mes por algo tan insignificante como que no te guste una publicación política en las redes sociales. ¿Y si decidieran que todos los adultos sólo pueden tomar dos cervezas a la semana? (¡Trágico!) Podrían bloquear automáticamente los pagos de cualquier compra relacionada con el alcohol. Si centralizaran y controlarán el acceso a internet, seguramente bloquearían un artículo como éste y te impedirían leerlo, reprimiendo la libertad de expresión de forma similar a como sucede en Corea del Norte y China. ¿Hemos pintado ya un panorama lo suficientemente sombrío? Creemos que ya lo has entendido.

Por si esto no fuera suficiente para impulsar una web 3.0 descentralizada, como ya hemos mencionado brevemente, muchas de los procesos de los gigantes tecnológicos son francamente espeluznantes y poco éticos, están dañando a la sociedad al fomentar las divisiones sociales entre puntos de vista opuestos, y manipulando los resultados de eventos importantes como elecciones o el Brexit. Las grandes empresas tecnológicas han sobrepasado los límites y nos están afectando a todos. Se han publicado muchos artículos sobre cómo los gigantes de las redes sociales están explotando y socavando la democracia. Recientemente han salido a la luz algunos documentos reveladores y profundamente perturbadores que muestran cómo las personas son utilizadas como ganado, siendo manipuladas y explotadas por grandes empresas tecnológicas como Facebook, Google y Amazon. Se ha descubierto que Facebook (que también es dueña de Instagram) ha estado compartiendo y vendiendo secretamente nuestra información privada a terceros para la creación de perfiles psicográficos de usuarios para influir en las campañas políticas o para su venta a empresas de marketing y publicidad para que puedan aprovechar esa información para dirigirnos a la publicidad.

Los gigantes de las redes sociales filtraron información privada engañando a la opinión popular e influyendo en los resultados del Brexit y las elecciones políticas. Imagen vía Cnet

Estos actos poco éticos de Facebook han hecho que la empresa se vea envuelta en situaciones controvertidas, lo que la ha llevado a tribunales en múltiples ocasiones. Facebook ha sido acusada y juzgada por algunos de los peores delitos que existen en nuestra sociedad, como la propagación de discursos de odio que alimentaron genocidios, por crímenes de guerra en Myanmar o por abusos a los derechos humanos, lo que ha impulsado la creación de múltiples movimientos “anti Facebook” en todo el mundo. Si aún no has visto los documentales “The Social Dilemma” o “The Creepy Line“, sobre cómo las redes sociales y los gigantes de la tecnología están manipulando a la sociedad, te los recomendamos para que entiendas las intenciones de muchas de estas empresas con las que interactuamos a diario. Intenta verlos sin tirar tu ordenador por la ventana por el miedo, el asco y la rabia que producen, allí entenderás por qué la descentralización es tan importante.

Google tiene el poder de manipular los resultados políticos y económicos. Imagen vía usnews.com

A medida que descubrimos más y más acerca de los engaños que hay detrás de algunos de estos gigantes tecnológicos y cómo estamos siendo manipulados, comprendemos por qué la gente está furiosa y en búsqueda de una alternativa. Esto está dando lugar a uno de los factores que impulsan la revolución y la adopción de una web 3.0 descentralizada basada en la tecnología de cadena de bloques.

Implementaciones actuales de la web 3.0

Como hemos mencionado anteriormente, la web 3.0 no significa necesariamente que esté integrada con la tecnología de cadena de bloques, pero para el resto de este artículo vamos a trabajar bajo la suposición de que estos dos sectores se están desarrollando y están siendo explotados en conjunto, por lo  que en cada mención de la web 3.0 se debe asumir que se incluye a la cadena de bloques en el marco de internet. Las tecnologías de cadena de bloques como Bitcoin, o más aún, Ethereum, ya están proporcionando el marco inicial y básico necesario para la web 3.0 y hemos visto muchos casos de uso ya implementados y construidos sobre esta innovación tecnológica. ¿Recuerdas que internet fue la innovación tecnológica que más rápido se ha adoptado? Pues, la adopción que han tenido las criptomonedas y la tecnología de cadena de bloques está superando la adopción que tuvo internet en sus inicios, lo que significa que ya está presente de muchas maneras en nuestras vidas y probablemente continuará su crecimiento exponencial en todos los ámbitos de la vida de los usuarios de internet.

La adopción de las criptomonedas es la más rápida de la historia de la humanidad, y se está implementando en finanzas, salud, redes sociales, sitios de streaming de vídeo, alimentación y agricultura, y prácticamente en todos las industrias del mundo. Imagen vía Chaindebrief

La tecnología de cadenas de bloques ha tenido su mayor impacto en el sector de las finanzas y por una buena razón. Tras los innumerables escándalos y negocios sucios que han existido en el sector de las finanzas tradicionales desde la creación del propio sistema monetario, la tecnología de cadena de bloques y la web 3.0, gracias a redes como Ethereum, han proporcionado un marco que está reemplazando la confianza que se ha perdido en el sector financiero tradicional, ayudando a eliminar la corrupción, reduciendo los costos y aumentando la eficiencia mediante la reconstrucción de aplicaciones financieras que tienen el potencial de reemplazar todos los servicios tradicionales que existen actualmente.

La DeFi está proporcionando una evolución muy esperada al anticuado y corrupto sistema financiero tradicional. Imagen vía nimera.io

Las aplicaciones financieras descentralizadas como Aave ya están proporcionando muchos de los servicios de los bancos tradicionales, permitiendo a los usuarios prestar sus criptomonedas para ganar intereses y pedir prestado dinero contra sus posesiones de criptomonedas, un método que funciona mucho mejor que el que ofrecen los bancos. Las aplicaciones financieras descentralizadas ya están proporcionando a los usuarios la capacidad de pedir préstamos con garantías, prestar, invertir, obtener hipotecas e incluso comprar seguros casi instantáneamente, evitando la burocracia y las restricciones impuestas por los bancos, y sin necesidad de pagar comisiones y tasas de interés exorbitantes. El concepto de un sistema financiero P2P es realmente sorprendente.

Los usuarios de la DeFi disfrutan de una rentabilidad pasiva de entre el 1.5% y el 10% mensual, muy superior a la que ofrecen los bancos. Imagen vía Defipulse

La gente se ha cansado de que los bancos ganen miles de millones a costa de sus clientes, ofreciendo muy poco a cambio, a menos que estés contento con el 0.01% de interés que te pagan en tus cuentas de ahorro mientras te cobran un 20% de interés por usar sus tarjetas de crédito, por lo que millones de usuarios han recurrido a las Finanzas Descentralizadas (DeFi) para disfrutar de rendimientos muy superiores a los que se ofrecen en las finanzas tradicionales. Podríamos hablar mucho de lo superior que es la DeFi a las finanzas tradicionales, pero para evitar enredos, puedes aprender más sobre la DeFi aquí. Al momento de escribir este artículo, existen más de 100.000 millones de dólares bloqueados en los protocolos de la DeFi, y estos millones de usuarios están disfrutando de mayores rendimientos, menos trámites, menos burocracia y de mejores oportunidades para alcanzar un nivel de salud financiera con el que los bancos nunca podrán competir. La adopción de la DeFi es una tendencia que ha visto un crecimiento exponencial, y es una tendencia que se espera que continúe a medida que las generaciones más jóvenes confíen más de su riqueza a la tecnología de cadena de bloques y a aplicaciones de la DeFi y no al sistema financiero tradicional.

El número de usuarios de la DeFi aumenta a un ritmo exponencial. Imagen vía dune analytics

La web 3.0 también está borrando las líneas entre la realidad física y la realidad digital, lo que está teniendo un gran impacto en las industrias de los videojuegos, la moda y la medicina. Seguro que en las últimas semanas has oído hablar del “metaverso“, ya que Facebook y Microsoft se han involucrado a lo grande, invirtiendo miles de millones de dólares en la creación de sus propios mundos virtuales, además algunos metaversos descentralizados como Decentraland, The Sandbox y Bloktopia han estado apareciendo en todo YouTube. La web 3.0 y la cadena de bloques están afectando a la multimillonaria industria de los videojuegos y han creado un panorama económico completamente nuevo que utiliza el  modelo de “jugar para ganar“ que podría alterar nuestro sistema económico actual, como hemos cubierto repetidamente aquí, aquí y aquí. Algunas tecnologías como la realidad virtual, la realidad aumentada y el metaverso ya están en funcionamiento, y apenas estamos en los inicios de la web 3.0

La desaparición de los límites entre la realidad y el entorno virtual se está conociendo como “web espacial”, que será un desarrollo que irá más allá de la web 3.0 y que contará con capacidades mejoradas de geolocalización, tecnologías de realidad virtual, realidad aumentada y metaversos totalmente inmersivos, que serán tan realistas que no se podrá distinguir entre lo virtual y lo real. Aunque la web espacial es demasiado compleja para analizarla aquí, será esencialmente un mapa hiperrealista de todo nuestro mundo que incluirá todos los aspectos de la vida (aparte de la vida real) de manera conectada e interactiva. Deloitte publicó un fantástico artículo en profundidad sobre el concepto de la web espacial aquí.

Mapa de la web espacial. Imagen vía Deloitte

Por qué es importante todo esto

La transición a la web 3.0 es una evolución tecnológica inevitable, y nos brindará la capacidad para construir o incorporar la tecnología de cadena de bloques en nuestras vidas y así convertirse en una revolución “popular” dentro de esta evolución tecnológica. Muchos economistas y tecnólogos se han referido a la tecnología de cadena de bloques como “la cuarta revolución industrial”, y se han escrito, publicado y estudiado extensamente en los círculos académicos y empresariales documentos fantásticos como el titulado “Dando forma a la cuarta revolución industrial” de Klaus Schwab, fundador y presidente ejecutivo del Foro Económico Mundial, con un prólogo de Satya Nadella, director general de Microsoft. El Parlamento Europeo también publicó un artículo de 28 páginas titulado “Cómo la tecnología de cadena de bloques podría cambiar nuestras vidas“, que puedes leer si quieres profundizar en el tema, ya que un solo artículo no podría hacer suficiente justicia a la innovación que hay detrás de la tecnología de cadena de bloques. Si esta tecnología es lo suficientemente disruptiva como para llamar la atención del Foro Económico Mundial y de funcionarios gubernamentales de todo el mundo, merece la pena conocerla.

Muchas personas ¿apoyan esta revolución, puesto que proporciona un rayo de esperanza de tener un futuro donde contemos con una infraestructura descentralizada P2P, sin terceros de confianza, que puede soportar sistemas monetarios, sistemas de salud y cualquier sistema de infraestructuras, además de la libre transmisión de información, sin sesgos o manipulaciones, ya que estas infraestructuras y sistemas no serán controlados por ninguna autoridad central que implemente sus agendas, liberándonos efectivamente de los grilletes de los gobiernos e instituciones que prefieren beneficios y no les importa la vida humana.

También hay personas que sienten que esto es un sueño imposible, una visión utópica, posiblemente anárquica y libertaria, que probablemente nunca se hará realidad, pues esos mismos regímenes autoritarios de los que la gente quiere salvarse también están adoptando y utilizando la tecnología de la cadena de bloques y la web 3.0 para adaptarse y cambiar con estas innovaciones, sin permitir que sean reemplazados o se vuelvan redundantes, lo que también es un escenario muy probable. Cualquiera de los dos escenarios nos parecen posibles, pues puede no ser tan utópico como a muchos les gustaría, e incluso podría ser una solución a los problemas actuales que existen en la web 2.0.

Mientras algunos sueñan con una utopía de la cadena de bloques, otros temen un régimen autoritario con la cadena de bloques, pero despojémonos de los prejuicios, las esperanzas y los temores y veamos los hechos. Independientemente del futuro que creas que tendrá la cadena de bloques y la web 3.0, esta tecnología  tiene algunos beneficios importantes y un potencial casi ilimitado, sólo limitado principalmente por la innovación y la imaginación humana.

Algunos de los beneficios de la web 3.0. Imagen vía hackernoon

El rasgo clave que define a la web 3.0 es que no será un sistema utópico, no será un sistema descentralizado, o un sistema monetario P2P o cualquier otro tipo de sistema o infraestructura, tampoco será la inmersión total en un metaverso virtual. Aunque todas esas son características, rasgos y productos potenciales de la web 3.0, el rasgo clave que la define será simplemente la verificabilidad. Independientemente de lo que representa la futura web 3.0, lo que trascenderá será que todos los resultados posibles, que cada dato de cada transacción que se produzcan en la cadena de bloques será a prueba de manipulaciones, tendrá una marca de tiempo y se registrará públicamente para que cualquiera pueda verificar y autenticar la transmisión de los datos. Esta es la característica más impactante de esta tecnología. Cuando las transacciones son públicamente verificables ya no hay necesidad de confiar en que alguien está diciendo la verdad, ya que todo será 100% transparente en la cadena de bloques.

Actualmente no tenemos ni idea de lo que ocurre con nuestros datos o identidades mientras seguimos pasando más tiempo y subiendo más información a internet, ¿a dónde va esa información y cómo se utiliza? La web 3.0 añadirá una capa de transparencia y honestidad necesaria, y obligará a todos a ser más éticos y morales de lo que son en la actualidad. Si combinamos la verificabilidad con la funcionalidad de los contratos inteligentes construidos sobre esa tecnología, estaremos viviendo en una sociedad en la que todo funcionará con precisión, eliminando la desconfianza, la intervención de terceros, la manipulación, el engaño y el error humano en innumerables escenarios.

La tecnología de cadena de bloques puede proporcionar la transparencia necesaria para que vivir en el “Meta” de Mark Zuckerberg sea un poco menos espeluznante. Imagen vía New York Times.

La web 3.0 ampliará fundamentalmente el alcance de lo que es posible entre las interacciones humanas y las máquinas y ampliará las redes de pago P2P existentes, los flujos de información serán más ricos y habrá confianza en las transferencias de datos, como las que ya disfrutan los usuarios de las criptomonedas en la actualidad. Esta revolución tecnológica apoyará la aparición de nuevos modelos económicos y empresariales, como el empoderamiento de grupos cooperativos globales, las organizaciones autónomas descentralizadas y los mercados autosuficientes y autogobernados. Esto es significativo porque:

Las sociedades se volverán más eficientes al transferir el valor entre iguales, pudiendo eliminar los intermediarios, y devolviendo el valor directamente a los compradores y proveedores en un mercado. Uno de nuestros proyectos favoritos que ya se está desarrollando en este ámbito es Authentium, que utiliza la tecnología de cadena de bloques para eliminar a intermediarios, a menudo explotadores, de la industria de la cadena de suministro, permitiendo que los agricultores y los trabajadores agrícolas que trabajan duro cada día para alimentar al planeta puedan obtener mayores beneficios.

La propiedad mutua y la gobernanza de los sistemas descentralizados pueden permitir la colaboración y la incentivación a través de nuevos modelos económicos para resolver problemas complejos y sofisticados.

Las personas serán dueñas de sus propios datos, que ya no se venderán al mejor postor sin su consentimiento.

La descentralización resolverá el problema de la dependencia de plataformas o de empresas, lo que permite “asegurar el futuro” de las empresas, los negocios y las inversiones.

La mejora de las medidas de seguridad, verificación y validación a medida que los humanos, las empresas y las máquinas comparten información.

Conclusiones

Aunque es posible que la web 3.0 no cause la revolución popular que muchos esperan, no podemos negar que la tecnología de cadena de bloques seguirá desempeñando un papel importante en todas las industrias relacionadas con internet. Esto ya es bastante evidente teniendo en cuenta que los gobiernos y los gigantes de la tecnología están invirtiendo miles de millones de dólares en infraestructura de cadena de bloques. Mientras que la web 3.0 nos llevará a un futuro que mezclará la realidad con la realidad virtual e incorporará aspectos de aprendizaje automático e inteligencia artificial para hacer que nuestras interacciones con nuestros dispositivos sean más humanas, la cadena de bloques añadirá una propuesta muy interesante a lo que será posible tanto en nuestras vidas digitales como físicas.

El auge de las organizaciones autónomas descentralizadas (DAOs) construidas sobre la cadena de bloques es una propuesta interesante, ya que empresas importantes como Atari buscan ceder el control de una parte de su negocio a la comunidad y muchos otros equipos como Uniswap y Compound Finance están buscando ceder el control total de su negocio a su comunidad. Las DAOs están proporcionando quizás el modelo de negocio más justo y democrático que la humanidad ha disfrutado.

Diagrama simple que compara una DAO con una jerarquía empresarial tradicional. Imagen vía medium.com/smartz-blog

La integración de la cadena de bloques en la web 3.0 también está transformando por completo el modelo económico del planeta tal y como lo conocemos, ya que miles de millones de dólares se están destinando a plataformas financieras descentralizadas, sacando dinero del sector bancario, de las inversiones y de los métodos de inversión tradicionales, como el oro y las propiedades inmobiliarias. Muchos estrategas e inversores en este ámbito, como Raoul Pal y Michael Saylor, se refieren a esta revolución como “la mayor transferencia de riqueza en la historia de la humanidad” y un artículo de Yahoo afirma que el 47% de los millennials millonarios tienen al menos el 25% de su riqueza en criptomonedas. Estos millennials son los innovadores y visionarios del mañana, así que, si ellos creen en la cadena de bloques ahora, es probable que la incorporen a sus futuros negocios, o que las empresas integren esta tecnología para atraer a las generaciones más jóvenes, fomentando el desarrollo de la cadena de bloques junto con la web 3.0. Curiosamente, el presidente de la SEC de Estados Unidos, Gary Gensler, también ha admitido recientemente que el Bitcoin compite directamente con el sistema bancario estadounidense.

El Bitcoin ha sido el activo de mayor rendimiento de la década, desviando miles de millones de dólares de los mercados tradicionales. Imagen vía Yahoo

Aunque todavía no se sabe si la web 3.0 nos librará de las atrocidades que actualmente experimentamos en la actual forma de la web 2.0, esta web es la mejor oportunidad que tenemos, lo que nos llena de esperanzas para el futuro. Algunas redes como Bitcoin y Ethereum seguirán proporcionando a los usuarios un refugio frente a los ataques a los que todos nos enfrentamos durante nuestras actuales interacciones cotidianas en la web 2.0. Puede que la web 3.0 no “aplaste” y reemplace el sistema actual, pero tiene una gran oportunidad de solucionar muchos de los aspectos que están rotos en cuanto a centralización, vigilancia, monetización de los datos humanos y del hecho de que los seres humanos sean tratados como ciudadanos de segunda clase por nuestros bancos, las grandes empresas tecnológicas y, a menudo, nuestros gobiernos. Nos gusta mucho la frase que dice, “la tecnología de cadena de bloques puede no ser el fin de todo, pero es la mejor oportunidad que tenemos”, y el potencial que la integración de cadena de bloques tiene para impactar todos los aspectos de nuestras vidas a medida que nos aventuramos en la web 3.0 es enorme.

Aviso: Estas son las opiniones del autor y no deben ser consideradas como consejos de inversión. Los lectores deben hacer su propia investigación.

El artículo What is Web 3.0 and Why it Has Insane Potential fue publicado por primera vez en Coin Bureau.

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